Guayaquil: Neblina de polvo en una nueva obra con retraso en Los Ceibos
El trabajo debió finalizar el 2 de mayo, pero la promesa no se cumplió
Una obra que el Municipio de Guayaquil anunció el pasado 25 de abril sigue ejecutándose. Esto, pese a que la promesa era que estaría terminada el 2 de mayo anterior.
El mal estado de la avenida Leopoldo Carrera Calvo, en Los Ceibos, provocó que una parte de la vía sea cerrada. Sin embargo, luego de 14 días se mantiene de esa manera. “Nos dijeron que a inicios de mayo la volverían a habilitar. Ya estamos 8 de mayo (ayer), pero sigue igual o peor. Muchos carros se han dañado aquí por culpa de los cráteres que hay en las calles”, comentó Janio Santino, un conductor que transita a diario por el sector.
Eduardo Estrada: “Le he ganado 10 juicios a la tecnología tramposa y amañada”
Leer másCecilia Barreno, una moradora de la zona, reclama que la gran mayoría del día parece que tuvieran neblina, pero no por el clima, sino por el polvo que se levanta en la calle a causa de los trabajos paralizados. “Siento que estuviera en una carretera de la cordillera, pero no por el frío, sino por el polvo. Muchos nos estamos enfermando. Antes había problemas, pero ahora está todo peor”, reclamó la residente de la ciudadela Las Cumbres.
En el sitio, la tarde de ayer había unos cinco trabajadores que no quisieron responderle al equipo periodístico de este Diario cuánto tardarían en dejar todo listo para el libre tránsito. EXPRESO consultó vía correo electrónico al Municipio cuáles son las razones del retraso y cuándo será entregada la obra, pero hasta el cierre de esta edición no hubo respuesta.
Otro problema que se evidencia en el sitio es el intenso tráfico que se genera, debido al cierre y a la lenta circulación por el mal estado de las calles.
“En esta arteria no se puede ir a más de 20 kilómetros por hora, porque se te dañan los amortiguadores. Aquí se debe bajar completamente la velocidad y más arriba (cerca de Las Cumbres) está parcialmente cerrado, así que eso hace que el tráfico se ponga lento. Todo es un caos”, manifestó el conductor Luis Loor.