Un operativo le puso freno a las carreras clandestinas en Samborondón
La Policía retuvo 25 motos la madrugada de este 25 de septiembre, cerca de Ciudad Celeste
Tras las constantes quejas y denuncias por parte de los habitantes, en la avenida Samborondón, en la madrugada de este viernes 25 de septiembre, en un operativo conjunto entre la Policía Nacional, l aAutoridad de Tránsito de Samborondón, la CTE y Policía Municipal; más de 25 motos fueron retenidas por realizar carreras clandestinas. Asimismo fueron detenidos tres motociclistas por no tener licencia de conducir.
Hace un par de semanas, como lo publicó este Diario, hubo sancionados y más retenidos en el mismo cantón, por la misma causa.
Un grupo de jóvenes aprovechaban que las vías estaban despejadas para realizar actos de este tipo en las vías. 👇https://t.co/br6cVqckHr
— Diario Expreso (@Expresoec) August 28, 2020
Según informaron las autoridades, se logró interrumpir la realización de las carreras clandestinas. La vía escogida para las competencias ilegales, como lo ha venido publicando EXPRESO, era la entrada a Ciudad Celeste.
En todo el cantón de Samborondón, se solicitó a las máximas autoridades policiales la presencia de grupos especiales de inteligencia, los cuales están trabajando en el tema para evitar que estas actividades vuelven a generarse.
Ante las denuncias que se reciben en la Mesa de Seguridad del cantón Samborondón, explica el Cabildo a través de un comunicado, fue creada una comisión para buscar soluciones a los hechos delictivos. La Mesa de Seguridad, liderada por el alcalde Juan José Yunez Nowak está conformada por varias instituciones.
Necesitamos que este tipo de controles se mantenga para volver a tener tranquilidad. Nadie está en contra de los motociclistas. La moto es un medio de transporte, el problema está cuando las usan con otros fines. No solo delinquir, sino generar desorden y control, como es este caso.
Para Rose Terán, habitante de Ciudad Celeste, desde hace varios años han venido solicitando a las autoridades que le pongan freno a esta problemática que, advierten, se da cada jueves a partir de las 23:00 o más tarde. "Ha sido una locura escucharlos siempre esos días. Nosotros ya sabemos que no debemos salir de casa. Van como locos, gritando y bebiendo. Ellos se creían dueños de la zona. Sentíamos incluso miedo. Eran parte de la inseguridad del lugar", expresó.
