Guayaquil: El parque automotor avasalla a los ojos vigilantes de la ATM
Unos 1.100 agentes, incluidos oficiales y conductores, encaran a 680.000 carros. Expertos opinan que es insuficiente. La entidad tiene más territorio y prevé otros
Los números no cuadran. En Guayaquil, así como lo contó EXPRESO, llueven las quejas por la ausencia del plan de carrera y ascensos de los agentes civiles de tránsito que salieron a las calles tras unas cuatro promociones que efectuó la ATM. ¿Pero es suficiente el personal de la entidad para enfrentar el tráfico, teniendo en cuenta el crecimiento de la ciudad y más ahora que agarró la competencia de vía a la costa?
Se estima que el parque automotor asciende a 680.000 vehículos, mientras que en la otra orilla están alrededor de 1.100 agentes, incluidos oficiales, jefes, supervisores y conductores, de acuerdo a una fuente de la ATM. Las cifras, bajo la mirada de algunos especialistas de planificación y tránsito, dan cuenta que el personal no es suficiente.
Uno de ellos es Carlos Jiménez, experto en movilidad, transporte y ordenamiento, quien se lamenta que cada vez se construyan más “embudos”. “Se evidencia que no están claras las prioridades; se sigue priorizando a los automóviles y se percibe la falta de transparencia en brechas que, al parecer, carecen socialización”, dice.
El ascenso de los agentes de la ATM se mantiene en luz roja
Leer másSobre el tema, Jiménez se formula decenas de preguntas, con énfasis en el transporte público: ¿Cuántos buses hay? ¿Cuántos se necesitan? ¿Circulan por donde deben? ¿Dónde se consultan las rutas?
Resume que el dichoso plan de transporte y tránsito debería responder estas y otras interrogantes y que, paralelamente, se debe conjugar con el plan/mapa de uso de suelos proyectado.
El especialista en movilidad Carlos Salvatierra explica que lo principal es que la ciudad presente más indicadores sobre esta realidad. Enumera a los indicadores de factores asociados con accidentes de tránsito; de resultados, en el que intervienen accidentabilidad; y del costo promedio por mortalidad en accidentes de tránsito.
“Si no tenemos al menos estos indicadores con datos actualizados y luego sumados a los números de intersecciones en las vías (intersecciones señalizadas, semaforizadas), estaríamos obteniendo un número de decremento o incremento no vinculado de agentes de tránsito a la realidad manifestada por indicadores”, argumenta Salvatierra.
Agrega que el número que arrojen estos resultados solo respondería que donde se encuentre el problema de congestión se aliviará el tránsito, en horas pico.
Del grupo de 1.000 uniformados se conoce que al menos 950 son agentes civiles de tránsito, cuya mayoría portó el uniforme en el primer llamado a formar parte de la institución. De eso ha pasado más de 6 años, tiempo que la ATM lleva en Guayaquil, y que ahora se prevé extender a las parroquias rurales como Progreso, Posorja, El Morro. Todo eso se pretende para este 2022.
El tráfico de Guayaquil, un escenario para capacitar
Leer másSin embargo, se pusieron en marcha otras dos promociones; la última fue en mayo de 2019 y el escenario cambió, al igual que los números. La cifra del personal bajó considerablemente: apenas 24 uniformados se sumaron, en esa promoción, a las filas de la institución.
EXPRESO buscó nuevamente una entrevista con la entidad, pero ahora con el director de Control de Tránsito, Luis Lalama, pero así como ocurrió en torno a la publicación de ayer, esta no fue aprobada. En el aire quedan cuestionamientos como si el personal actual es suficiente para controlar y dirigir la movilidad, y si se prevé dar luz verde a una nueva convocatoria para agentes civiles de tránsito.
Pero la falta de personal incluso es percibida por los mismos agentes civiles de tránsito. Uno de ellos accedió a conversar con este Diario y, bajo el anonimato, declaró que -por ejemplo- uno de los efectos de la participación de los agentes en los operativos en conjunto con otras instituciones es que “se dejan desatendidos ciertos puntos” del tránsito. “A veces estamos una semana o dos en cierta zona o intersección, pero toca un operativo u ocurre un partido de fútbol importante y toca ir a cubrir eso y queda otro vacío”, destaca el uniformado.
El agente recalca que sí hace falta gente, por lo que cuestiona que la ATM haya adquirido, hace pocas semanas, unas camionetas para patrullar la ciudad sin conocer cuál personal se trepará en ellas. “Ahora, con vía a la costa, es más territorio. ¿Quién mismo irá en las camionetas y estará en las calles?”, cuestionó.