Guayaquil: Pasa el tiempo y los candados siguen colgados en los parques
Las principales áreas verdes tienen las puertas encadenadas y la ciudadanía dice ya no soportarlo. El argumento del Cabildo está pendiente
Siguen a media llave. Guayaquil todavía cuenta con diferentes áreas recreativas donde en algunas de sus puertas los candados son los que ‘saludan’ a los visitantes, empujándolos a buscar el único acceso disponible para entrar y poder realizar algún ejercicio, contemplar esculturas, animales o simplemente distraerse un momento.
La situación, que fue contada por EXPRESO hace un año, no tiene ninguna metamorfosis. Es por esto que la ciudadanía pone sobre la mesa el cuestionamiento de que, por ejemplo, si no existen reglas de aforo como en los días donde la pandemia obligó a encerrarse, por qué siguen algunos de estos accesos bloqueados hasta con cadenas.
Casa Rosada: Aquiles Álvarez asegura que el comedor está desmantelado
Leer másEntre los ejemplos se lucen los más representativos que se encuentran en el centro de la ciudad: el Centenario y el Seminario. En el primero está únicamente disponible el acceso en el sentido que cruza la avenida 9 de Octubre, pero si alguien pretende entrar por Primero de Mayo y Vélez no podrá hacerlo. Y, en efecto, le toca apresurar su paso hasta llegar a la 9.
En el segundo, rodeado de la Catedral Metropolitana y de un conocido centro comercial, solo mantiene abierto el ingreso de la calle Chile. Si alguno de los feligreses que estaba oyendo la misa en el mencionado templo y le dio ganas de observar las tortugas o las decenas de iguanas que ahí habitan, no puede ingresar en la puerta que está en el sentido de Chimborazo. Lo mismo ocurre con los ingresos que están en el sentido de Diez de Agosto y Clemente Ballén.
En el sur también hay otros que no todas las puertas abre, como el caso del parque Forestal, y otro es el parque principal de la ciudadela Kennedy, Clemente Yerovi.
En este último punto hay moradores que no se han percatado del panorama y recalcan que debería tener “libre acceso y más iluminación”, como lo señala el residente Charlie Fernández: “Como nos hemos acostumbrado a ingresar por un solo lado ni cuenta me he dado que el parque tiene puertas con candado, y es lamentable ver espacios públicos así, aunque teniendo en cuenta la delincuencia quizá hayan decidido dejarlo así, pero no debería”, opina.
Los parques también tienen una función de servicios ecosistémicos que sirve para la parte ambiental y cultural. Hace falta que se permita el goce y disfrute de estos lugares
Ante esta situación, Diario EXPRESO conversó con el licenciado en Turismo y docente César Santana, quien argumenta que esto surge por dos temas puntuales: la inseguridad y la pandemia. Explica que en el primer caso se lo hizo para que, asegura, “se piense en cerrar los parques para evitar robos y, en el segundo caso, para evitar aglomeraciones. Pero ya es hora de abrirlos”.
Cynthia Viteri llama "mentiroso" a Aquiles Álvarez y él la manda a la iglesia
Leer másSantana cursa un doctorado en Patrimonio y espera que al menos se le dé una apertura total a los que se encuentran en zonas regeneradas y turísticas. “Por otro lado, se requiere que la ciudadanía recupere estos espacios públicos para su uso y disfrute. Se pueden realizar actividades culturales y recreativas en los parques para convocar a la ciudadanía a usarlos”, sentencia.
Por su parte, Carlos Cortez, residente de la ciudadela Kennedy Norte, dice que probablemente esto se debe a temas de seguridad. “En alguna ocasión lo explicó el exalcalde Jaime Nebot, ya que implicaba poner más guardias para controlar la seguridad del espacio público”.
Él sostiene que Guayaquil aún no está preparada para tener sus parques 100 % abiertos, sin rejas. “No tenemos control y educación integral aún sobre temas de seguridad, respeto del espacio público, de vendedores ambulantes, etc. Es un tema cultural, el cual como sociedad aún tenemos falencias”, señala.
¿Cuál es la postura del Municipio? A la antigua administración se le consultaron cuáles eran las razones por las que los parques se mantenían así, parcialmente abiertos, pero no hubo una respuesta. Ahora, con la nueva Alcaldía, otra vez se le preguntó pero, hasta el cierre de este artículo, no llegó la contestación. También se espera la respuesta sobre si así es que deben continuar las áreas recreativas.
No creo que estamos preparados para una ciudad con parques 100 % abiertos, sin rejas. No tenemos control y educación aún sobre temas de seguridad, respeto del espacio público, etc.
Este caso recuerda a la idea de retirar las rejas del Malecón Simón Bolívar, una propuesta que lanzó el actual alcalde Aquiles Álvarez, y que abrió el debate en la ciudadanía. Por un lado están quienes quieren disfrutar de los espacios públicos de la ciudad sin barreras, pero otros consideran que con los cercos se sienten un poco más seguros.