Pascuales, gobernada por el desorden de las tricimotos
Moradores se quejan por el mal servicio que reciben. Los transportistas son acusados de robos y venta de droga. Ellos dicen que no todos son iguales
El clamor popular y las quejas de los ciudadanos son evidentes. Al consultarles a los residentes de la parroquia Pascuales, en Guayaquil, su opinión respecto al servicio que dan las tricimotos, hay una palabra que se repite: desorden. Ellos son los causantes del desorden, advierten.
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Leer más“Los tricimoteros no respetan a nadie, hacen lo que les da la gana, se pasan los semáforos en rojo y encima se ponen más bravos cuando se les reclama. Es cierto que ellos nos dan un servicio. Sin embargo, creen que esta tierra es gobernada por ellos. A veces por eso prefiero hasta caminar, voy más tranquilo”, cuenta indignado el residente Freddy García.
El hombre que se gana la vida vendiendo pollo en una esquina del centro, describe lo que vive a diario. “Abunda el desorden, la patanada y la delincuencia. A veces pasan con sus motos con los parlantes a todo volumen, ni siquiera están trabajando, solo salen a fastidiar. Estamos hartos”, agregó.
Mientras cuenta su experiencia, este Diario fue testigo de cómo una tricimoto casi provoca un choque con un taxi.
“Si tan solo hubiese más control, si tan solo dejáramos de usarlas... Este es un mal necesario, duele decirlo. Los controles son escasos, no sé qué hacer para que la imprudencia no reine más en este sitio”, dijo el hombre de 56 años.
Ellos aquí roban y venden drogas, aparte provocan mucho tráfico y hasta accidentes. A veces no están trabajando y van con el volumen alto, no se les puede decir nada porque son bravos.
Ante esto, los propios tricimoteros se quejan, al asegurar que quienes son los causantes de este embrollo son quienes dan el servicio de forma ilegal. “No es justo que mientras algunos nos preocupamos por hacerlo todo de forma legal, hay otros que no solo no siguen las reglas, sino que hacen sentir insegura a la parroquia, los clientes y hasta al peatón, por su forma de conducir. Estoy de acuerdo con que se hagan controles, con que vengan los agentes”, mencionó Edmundo León.
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Leer más“Yo he escuchado que roban e incluso que venden droga. Son múltiples las quejas. Y es que más de un conductor se desplaza sin papeles”, comentó León.
La usuaria Jazmín Chérrez corrobora la información. Aun así, advierte, las utiliza “pese al peligro” porque el costo es mucho menor al de un taxi. “A veces no conducen bien y son groseros con nosotros, pero incluso el pasaje del bus suele ser más caro, así que igual nos montamos. Es lamentable decirlo”, agregó, mientras buscaba una tricimoto de color amarillo, que son las que pueden circular por el sector.
Sobre esta situación, EXPRESO consultó a la Autoridad de Tránsito y Movilidad (ATM) sobre los controles y sanciones que emiten y la solución que le darán al problema, pero hasta el cierre de esta edición no se obtuvo ninguna respuesta.
Las quejas entre los peatones y los conductores de vehículos se suman a la lista. Aseguran que si bien tienen el derecho a trabajar, deberían hacerlo no solo con los papeles en regla, sino de una forma consciente y que no ponga en riesgo a las familias.
La comunidad lo dice al hacer énfasis en que los conductores suelen girar en u en la misma calle, aun cuando esta es estrecha; y suelen desplazarse en contravía.
“La ATM o quien sea debería enseñarles a maniobrar porque son capaz de irse encima tuyo o de los negocios. En el centro solo hay un semáforo y no se lo respeta, ya se imagina la locura que se arma. La calle es angosta y por ella pasan buses, metrovías, carros particulares, taxis y tricimotos. Tremendo caos”, enfatizó el taxista José Uriña.
Hay muchos que no están regulados y hacen los que les da la gana. No debemos ser juzgados todos por igual, estamos los que sí brindamos un buen servicio.