Playas, otra perjudicada del desorden aéreo
En la calle 15 de Agosto es posible tocar ya los cables en los balcones. Las quejas se multiplican
Los tallarines colgantes no son un problema exclusivo de Guayaquil, lo sufre General Villamil Playas y, de forma particular, los vecinos de la avenida 15 de Agosto; que han contactado a este Diario para detallar las molestias que experimentan.
Viviendo entre ratas y basura en el botadero municipal de Playas
Leer másLos cables colgados de los postes, a decir de la residente Cenia Orrala, pasan sobre las cabezas de quienes habitan a lo largo de esta vía, que inicia en la avenida Pedro Menéndez Gilbert y culmina en la Zenón Macías. “Ya nadie puede asomarse a los balcones, de hecho ni siquiera a las ventanas. ¿Para qué? Si no se puede ver nada. Es un peligro vivir así, estamos hartos. Me apena, me duele que la regeneración no llegue a este y otros barrios”, se quejó.
Los cables, según precisaron los afectados, tapan la visión de quienes viven en la planta alta de sus viviendas, que se ven limitados a observar nada más que telarañas de cables que incluso a veces están hecho nudos. “Me aterra que un día haya una sobrecarga. ¿Quién responde por esto? ¿Quién responde por toda Playas, que está así en cada rincón?”, cuestionó Leonela Maridueña, también habitante.
Rocío Macías, rectora de la Unidad Educativa Zenón Macías, ubicada en la avenida Jaime Roldós Aguilera, frente al Parque de la Madre, asegura que, frente a las aulas del segundo piso, prácticamente se pueden tocar los ‘tallarines’; lo que pone en peligro a los estudiantes. “En una ocasión anterior ya pedimos a la Corporación Nacional de Electricidad, CNEL, que responda al daño, pero medio arreglaron y ahora otra vez se complicó”, explicó.
Dos toneladas de plástico y redes ‘pescó’ la comunidad en el mar
Leer másFrente a esta situación, Vicente Vera, director de Ingeniería y Construcciones Subrogante de CNEL, aseguró que los cables en las estructuras colocadas responden a un contrato otorgado por la Unidad de Negocio de CNEL en Santa Elena a las empresas de telefonía, telecomunicaciones, entre otras. Señaló que ellas cumplen con el manual que rige la instalación de estas redes. Y aunque no precisó en qué consisten esas cláusulas y si estas dan pie o permiten que la maraña de cables sean parte de las estructuras; indicó que coordinará para el próximo 3 de agosto los trabajos de reordenamiento y empaquetamiento de las redes.
Tras el pronunciamiento, las familias han dicho que estarán pendientes a si se cumple o no la gestión. Y a la par hacen un llamado a que se replique la acción en las otras zonas “evidentemente afectadas”.