
Un proyecto analiza el poder desde el tratamiento de la imagen en la prensa
Se trata de un trabajo multidisciplinario que financió la UArtes que atestigua, almacena y resignifica la memoria.
El pasado 14 de octubre se realizó la presentación del trabajo 'Al Mando: La representación del poder' y de la plataforma almando.art, donde se muestra el proyecto multidisciplinario de información y reflexión que surge de la investigación "La representación del poder, derives teóricas, escénicas y visuales", financiada por la Universidad de las Artes para el bienio 2019-2020.
En la jornada se presentó la intervención fotográfica a cargo de Amaury Martínez, arquitecto y fotógrafo, junto al realizador audiovisual Pedro Intriago. Además se proyectó 'El Poder En Mi Constitución', pieza de videodanza dirigida e interpretada por Carolina Pepper, comunicadora, bailarina , coreógrafa y docente de la Universidad de las Artes.
Ambas obras son las primeras derivas artísticas de la investigación que dirigen Agustín Garcells y Natalia Tamayo.

Al Mando indaga en el vasto material fotográfico del archivo histórico del diario El Telégrafo, haciendo foco en el registro de imágenes sobre el poder político del país en diferentes momentos y personajes siguiendo tres ejes de comparación.
- El poder dictatorial: la representación del poder en dictaduras.
- El poder defenestrado: la representación del poder en crisis.
- El poder mediático: la representación del poder.
Exploramos las decisiones técnicas que tomaba el fotógrafo. Las imágenes movilizan emociones e interpelan posturas valorativas.
A partir de la investigación histórica textual y gráfica, recolectada en el periódico, se construyó un imaginario común fundamentado en textos analíticos que exploran las diversas representaciones del poder y la participación de la prensa en la construcción de los relatos políticos de la historia del Ecuador.
El equipo se acercó al quehacer fotográfico de prensa desde dos aristas: el fotoperiodismo y la fotografía como arte.
Al Mando se presenta como un dispositivo que atestigua, almacena y resignifica la memoria, invitándonos a reflexionar en el campo de lo político y los medios de comunicación, desde las artes visuales, la danza y el movimiento.
"Nos acercamos a las imágenes de los gobernantes ecuatorianos que tuvieron todo el poder en sus manos –las dictaduras- o que perdieron en un instante sus cargos –los defenestrados- para reflexionar desde la visualidad cómo se construyó y representó el poder", resume el equipo en el portal.
Esas imágenes del archivo se trasladaron al campo artístico para presentar dos propuestas: Una visual que rescata el pasado, propone nuevas lecturas en el presente a partir del olvido y de las marcas propias del uso de las fotografías para resignificar y entender la construcción del poder como un mensaje implícito destinado a la audiencia de un medio de comunicación impreso.
Un archivo no es una imagen ni impoluta ni histórica. Estuvo en construcción. Es dinámica y su mirada posee el corte editorial del diario. El trabajo pone en escena las lógicas de comunicación que se daban en los medios.
Y otra propuesta escénica, que parte desde la base del performance y la danza contemporánea como lenguajes del movimiento, con sus cuestionamientos sobre los paradigmas que rigen nuestros cuerpos y sus roles en la vida social y política, así como en el arte -que es política también-, planteando así una interpretación de la forma en que el ejercicio del poder, y sus representaciones mediatizadas, impactan tanto en el imaginario como en la memoria corporal individual y colectiva.
