Guayaquil: Puerto Santa Ana, el epicentro del ‘after office’
Guayaquileños cree que este sitio es el más seguro para congregarse. La situación es distinta en Urdesa, la Kennedy o Urbanor
Cuando el reloj marca la hora de salida, muchos guayaquileños buscan qué hacer para desestresarse. Es jueves o viernes y el cuerpo lo sabe. Pero qué hacer y dónde son las grandes interrogantes de algunos trabajadores.
Un mercadito para disfrutar con la naturaleza
Leer másPara varios, la delincuencia es el factor que determina a qué sitios es prudente ir; para otros, los virus, ahora la viruela del mono, manifiesta Kevin Acosta, capitán del bar y restaurante El Camaleón, ubicado en el Puerto Santa Ana, en las faldas del cerro Santa Ana, en el centro-norte de Guayaquil. A pesar de estas preocupaciones, muchos prefieren ir a ese espacio, donde los establecimientos están al aire libre, frente al río Guayas.
A Paola Soto, de 46 años, este sector de la ciudad le genera una sensación de seguridad, dice a EXPRESO; a diferencia de los lugares de esparcimiento de las ciudadelas Urdesa, Los Ceibos u otro sitio de la urbe, ya que no se siente protegida allí. También gusta de ir a la zona gastronómica del centro comercial Mall del Sol o a los que están en la parroquia La Puntilla del cantón Samborondón.
PUEDES LEER: Un atractivo turístico por ofertar en Guayaquil: las cúpulas
Turismo, la carta para realzar el brillo del barrio Centenario
Leer másEn esa ocasión, un jueves, ella junto con sus amigas decidieron, unánimemente, ir al Puerto Santa Ana. Todas apreciaban que en el sitio haya personal de seguridad privada, también que la Policía hacía sus recorridos, estaba iluminado y había cámaras por doquier.
Para Angie Morocho, de 26 años, el ambiente cálido también atrae. Expresa que hace poco volvió a salir por las noches, pero muy poco control policial observa, por lo que a su juicio si aumentaran el patrullaje, Guayaquil volvería a reactivarse en varias zonas y no solo acá. Y es que, a diferencia de esta zona, esa misma noche, la avenida Víctor Emilio Estrada de Urdesa, no lucía como en Puerto Santa Ana.
Aunque no todos los locales están llenos, Acosta comenta que “poco a poco” se ha estado reactivando los ‘after office’; indica que el local se llena en un 60 %. La gente frecuenta más estos lugares a partir del jueves. En cambio, los fines de semana son visitados más en familia.
TE INVITAMOS A LEER: Leopoldo López: “Maduro ha reafirmado su condición como dictador”
Pictórica pared del Banco Central, en el olvido eterno
Leer másEstrategias para atraer más clientes
No obstante, Jéssica García, gerente y propietaria del restaurante Bräu, un ‘gastro pub’ alemán, cree que la permanente promoción por parte de ellos y el hecho de que Puerto Santa Ana sea seguro ha hecho que los guayaquileños se sientan en confianza de volver a estos sitios. Además, de que los restaurantes y bares buscan mejorar cada día la experiencia de sus clientes a través de eventos temáticos, catas, creaciones novedosas de cocteles, intervenciones musicales de un DJ, promociones para del ‘Happy hour’ o para los jueves de chicas.
Y es que salir del estrés laboral es lo que buscan muchos jóvenes en estos sitios. Anderson Salinas, de 28 años, y Jean Paul Vásconez, de 27 años, querían distraerse. Ellos y cuatro amigos más se encontraron en Puerto Santa para beber cerveza y hablar de sus vidas. Al igual que las chicas, ellos se sentían seguros por la confianza que sentían a ver personal de seguridad.
TAMBIÉN PUEDE LEER: La academia realiza un congreso para rescatar el ecosistema perdido
Municipio renueva convenio de seguridad con el ECU 911
Leer másAl caminar por este corredor de locales, varios promotores invitaban a degustar el menú. El calor de Guayaquil no se sentía por la brisa y el viento del río. Pero no solo se veían jóvenes riéndose, bebiendo o comiendo, también familias con menores de la mano. Para ellos, también había ofertas gastronómicas.
Luz Molina, ‘hostess’ (anfitrión) del restaurante La Vaca Púrpura, comenta que los miércoles también van cobrando fuerza; de a poco los clientes los frecuentan más, debido a que van al darse cuenta de que en el lugar no es inseguro, por lo que prefieren ir a partir de las 18:00 hasta las 23:00. “Ellos saben que aquí no pasa nada”. Dice que, desde las fiestas julianas, la situación ha mejorado.
LE SUGERIMOS LEER: Las millas, más útiles para canjear servicios que boletos
Guayaquil entre dos polos: uno muy sucio y otro limpio
Leer másEsto, a pesar de que está prohibido que los autos se estacionen cerca de esta explanada gastronómica. En las aceras hay letreros que lo prohíben.
Otros sitios
Glenda Morán prefiere Fruta Bar, pero el ubicado en el centro de la ciudad. En cambio, para Elio Sánchez, Odisea Brewing, ubicado en la avenida Benjamín Rosales, es uno de los lugares que gusta visitar por la vista al río. También va a Arcos Plaza, ubicado en Samborondón. Para él, estos lugares brindan un excelente ambiente, los productos son de buena calidad y sobre todo seguridad.
Debbie Benites y Katherine Gómez comentan que prefieren ir a las piazzas ubicadas en Los Ceibos, como San Eduardo, porque es cercano a sus lugares de trabajo y también por la seguridad que les genera. A Gómez le da pena no ir a los locales de Urdesa por miedo; “la delincuencia ha destruido todo”, señala.
LE PODRÍA INTERESAR: Guayaquil: Falta de señales en los puentes produce daños en los tableros
Gina Sánchez
En un recorrido que hizo este Diario, se pudo constatar que los bares o gastrobares de La Kennedy, La Alborada, Urdenor, Urbanor y La Garzota están prácticamente vacíos. Se observa a una que otra persona en los sitios con un coctel en la mano, dejando atrás aquella imagen de fiesta; que hasta hace unos años se percibía prácticamente en todos los vecindarios o calles principales de la ciudad. “La identidad del guayaquileño, de ser fiestero, se perdió.
Es cosa ya del pasado y no porque uno quiera que sea así, sino porque la inseguridad nos obligó a elegir solo entre los espacios en que tengamos la posibilidad de no ver nuestra seguridad vulnerada”, señala Tatiana Alameda, guayaquileña de 27 años, que como la mayoría opta por ir a Puerto Santa Ana o reunirse en casas de amigos, una tendencia en auge.
¿Quieres seguir leyendo el contenido de EXPRESO? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!