Residentes de ciudadela se toman el control de etapa tras vivir 6 años de abandono
Vecinos de Madison Park de Sambo City denuncian mala gestión de la promotora. Aseguran que han hecho autogestión para atender necesidades
“Nos sentimos estafados por la promotora. Desde que compramos las casas, nos dijeron que en seis meses construirían el área social y han pasado seis años y todavía no hay nada”, reclama airado Daniel Sánchez, propietario de una vivienda en la etapa Madison Park de la urbanización Sambo City, ubicada en la vía Daule.
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Leer másEXPRESO recibió la denuncia de los residentes de esta zona, quienes aseguran que la empresa Vermiglio S. A. no ha cumplido con lo prometido. “Muchas cosas nos ofrecieron al inicio y no las han hecho. Está todo descuidado, desaseado y a medio terminar”, denuncia Sánchez, quien lleva tres años residiendo en la etapa.
Los directivos, que reconocen lo ocurrido y lo atribuyen a una serie de factores, entre ellos económicos, hacen énfasis en que este año empezarán a ejecutar las obras. Que las harán todas, prometen. Pero la comunidad desconfía.
Durante un recorrido por la urbanización, este Diario constató que el problema se evidencia desde la garita principal con un enorme cartel. “Esta etapa fue abandonada por Vermiglio S. A. Seis años de promesas y aún no tenemos club social”, se lee a distancia.
La vicepresidenta de la Asociación de Propietarios de la Urbanización Sambo City etapa Madison Park, explica que producto de la autogestión han podido realizar mejoras a la ciudadela. “Nosotros hemos tomado el control de la etapa. Hemos instalado cerco eléctrico, construimos rompevelocidades, barreras vehiculares, damos mantenimiento al alcantarillado y contratamos la guardianía que hoy tenemos. Nada de eso nos estaba dando la constructora, así que decidimos ver nosotros mismos por las necesidades”, explica la residente, que prefiere no dar su nombre por miedo a represalias.
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Leer másUna fachada a medio terminar, lo que debería ser el ingreso al club social y en su interior un hueco con varillas lleno de maleza que, según cuentan los perjudicados, debía ser la piscina, son parte de las escenas de la urbanización. “Nos engañaron, dijeron que iban a construir, hicieron este espacio y lleva ya dos años abandonado. La obra está paralizada. Nos sentimos perjudicados y engañados”, reclama Alexandra Salazar.
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Leer másEn la etapa, que tiene 130 viviendas, hay decenas de terrenos abandonados en medio de las casas, lo que genera problemas a los residentes. “El otro día sacamos una serpiente enorme. Además, esto se llena de mosquitos y roedores”, lamenta Sánchez.
Según la promotora Vermiglio S. A., “la etapa ha tenido un atraso en su desarrollo debido principalmente a situaciones externas, como por ejemplo la pandemia, las paralizaciones nacionales y decisiones internas de la compañía”, respondió Mariuxi Torres, jefa comercial de Sambo City. Y añadió que han realizado algunos cambios en el modelo de negocio.
Llevamos seis años esperando la construcción del club social. Nos sentimos abandonados, solo nos han prometido cosas y no se ha cumplido nada.
Los residentes hacemos todo por cuenta propia. Pagamos la guardianía, hicimos rompevelocidades, colocamos cerco eléctrico y arreglamos el alcantarillado.
“Pasamos de vender villas a vender terrenos urbanizados. Esto último tiene que ver con el ajuste y modificación de los diseños urbanísticos iniciales. Las obras de infraestructura están concluidas en el 51 % de los solares y el saldo (49 %) tiene un avance de obra del 85 % aproximadamente”, detalló a EXPRESO mediante un correo.
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Leer másSobre las quejas y los reclamos de los residentes, Torres indicó que las obras de infraestructura se iniciarán en el presente semestre, dando prioridad al club social.
Pese a esto, los propietarios muestran su inconformidad y aseguran que están cansados de las promesas. “Llevamos ya seis años con lo mismo, estamos hartos de las promesas incumplidas. Si no fuera por la directiva de la urbanización, esto sería un desastre”, recalca Sonia Apolo, tesorera de la asociación de dueños de casa.
La convivencia también se ha visto afectada por el abandono de la promotora. “Los niños no pueden salir. Deben jugar en las casas y algunos otros lo hacen en las calles, corriendo el riesgo de que venga un auto y los atropelle”, concluye Alexandra Salazar.