El sabor guayaquileño se concentrará en 10.000 metros cuadrados

Solo un año, el 2020, Valentina Andrade, de 34 años, no acudió a la feria que cataloga como la más “jugosa”. La guayaquileña ríe cuando confiesa que espera con ansias este mes desde hace ocho años, que Raíces abrió sus puertas en el Centro de Convenciones, siempre por cuatro días, para celebrar la Independencia de Guayaquil.

“A muchos les gusta los libros, a otros les gusta los cómics y a mí me gusta comer, soy guayaquileña. Por eso Raíces fue creado para mí porque pruebo de todo en un solo sitio. Cuando voy a la feria, ni desayuno. Y es que paso de hueca en hueca”, detalla a EXPRESO; al asegurar que, a diferencia del miedo que tuvo el año pasado para salir de casa por la pandemia, este tiene todo preparado. Irá con su familia el día de la inauguración, este 7 de octubre y el fin de semana, durante el feriado.

“Luego de casi dos años sin vernos, viene mi familia que vive en Miami. Son guayaquileños. No hay mejor plan que ir entonces a comer comida típica. Lo mejor del puerto”, advierte.

Este año, como ya lo anunció EXPRESO hace unas semanas, la feria gastronómica Raíces será completamente presencial y no híbrida como lo fue en 2020. Y según los datos proporcionados por la Empresa Pública Municipal de Turismo, en un área de 10.000 metros cuadrados, en el que se ubicarán las 27 huecas que en esta octava edición participarán (ver gráfico adjunto), podrán estar a la vez 5.357 personas, lo que corresponde al 75 % del aforo ahora permitido en este tipo de encuentros.

Para la ciudadanía, el hecho de que el país el 56 % de la población, a decir de los datos reportados por Salud, haya completado su proceso de vacunación, da luz verde a las familias para que participen de las fiestas, como antes. Días atrás, durante el pregón cívico con el que se inauguraron las celebraciones por los 201 años de Independencia, los espectadores, entre quienes hubo visitantes incluso de otras provincias, dijeron sentirse entusiasmados por volver a escuchar los tambores y las trompetas, y poder ser testigos del acto, pero ya de una manera física.

Laura Artieda, quien vive en Sauces 4, estuvo ese día en la Plaza Centenario y luego en el Cementerio General, donde se recordó el natalicio del Ruiseñor de América, Julio Jaramillo; y este fin de semana también recorrerá Raíces. “No me perderé este evento que muestra la cara más rica y diversa de Guayaquil. Estaré ahí y lo haré con mis amigos. Haremos nuestro tan esperado reencuentro y lo festejaremos con comida, como se debe”, señaló.

Tomás Rodríguez, quien por su profesión de docente ha estado trabajando en investigación sobre el peso que tiene la gastronomía en la identidad y patrimonio de un territorio, también acudirá a la feria. “Estoy feliz porque se siga desarrollando, porque es importante”, piensa; al tiempo que sugiere que en la ciudad se considere la estrategia de cómo debe presentarse la comida típica. Pone ejemplo a lo que hacen en México. “Allá, la experiencia la vives desde el momento en qué te sirven, los espacios populares son muy valorados y a eso hay que apuntar. Lo gourmet está bien, sí; pero este punto y con la variedad que tenemos, podría destacarse todavía mucho más”, agregó.