Una sala exhibirá 80 piezas precolombinas
El espacio no estaba disponible al público. Pertenece a la Casa de la Cultura del Guayas. Abrirá sus puertas en mayo próximo
El Museo de Arte Precolombino Carlos Zevallos Menéndez, de la Casa de la Cultura, Núcleo del Guayas, cuenta con múltiples figuras referentes a las culturas que marcaron la historia de la Costa ecuatoriana. Sin embargo, a pesar de que el espacio tiene tres salas, solo dos acogen a cerca de 500 piezas precolombinas de un total de 9.000 que reposan en la reserva de la institución.
“Esta tercera sala no estaba abierta al público porque no hemos tenido a los profesionales que nos ayuden con el montaje de las piezas”, comenta Gisella Peña, coordinadora del museo.
El espacio se llama Francisco Huerta Rendón y hace pocos días se ha iniciado con la presentación de 80 objetos, de diferentes tamaños, que serán instalados en siete vitrinas. Allí sobresalen figurinas, cerámicas, recipientes, sellos, entre otros artículos, de cada una de las culturas históricas.
No obstante, la última vitrina está dedicada al arqueólogo guayaquileño Carlos Zevallos Menéndez, quien realizó aportes al estudio de las culturas y diversas investigaciones.
Para el montaje fue necesaria la asesoría del museógrafo canadiense Claude Faubert, voluntario de la organización internacional Cesosaco. Posteriormente, se tiene previsto que esta ala del museo abra sus puertas el próximo 18 de mayo, fecha donde se conmemora el Día Internacional de los Museos.
La exposición se llamará temporalmente ‘De dónde venimos’, y estará dirigida a los niños y sus padres. En el lado derecho estarán las piezas que harán una especie de recorrido de la cronología de las culturas del Litoral ecuatoriano, y del izquierdo se fomentará la parte lúdica para entender cada periodo.
“El diseño, la forma y el material de las piezas son maravillosos e impresionantes. Canadá no tiene una historia antigua como Ecuador”, expresa Faubert, mientras señala que cada objeto cuenta con una ficha que detalla su información de origen. Entre los cientos de vestigios de la reserva de la institución, destaca la cultura arqueológica Valdivia, que se desarrolló durante el periodo formativo. “Es interesante, sobre todo porque es un símbolo del Ecuador. Para mí, los objetos tienen historia y relatos y la Valdivia es eso”, concluye Faubert.
