El senderismo se hace rutina en los bosques de Guayaquil
Las caminatas se impulsan desde el activismo ambiental. Cerro Blanco, de los favoritos de los guayaquileños.
Un grupo de ambientalistas de Guayaquil quiere lograr que la idea de que esta ciudad es solo centros comerciales y malecones casi privatizados se disipe, con la promoción del senderismo en los bosques.
El bosque protector Cerro Blanco, en el trazado de la autopista al aeropuerto
Leer másLa fundación Mingas por el Mar activó la campaña Un Bosque Mil Respiros, que busca potencializar estas áreas naturales e incentivar a la comunidad a visitar esos ecosistemas para de esta forma protegerlos.
Ayer en la mañana, activistas de ese grupo congregaron a ciudadanos que se sumaron a una caminata de dos horas por el Bosque Cerro Blanco, un pulmón de Guayaquil de 6.078 hectáreas, más de 200 especies de aves y una gran variedad de plantas.
“Hablar de bosque seco, es hablar de un bosque durmiente”, explicó Raúl Tomalá al grupo al que acompañó a la caminata, al referirse a la particularidad de esta zona del país, que carece de lluvias la segunda mitad del año.
"Cerro Blanco es 'el Yasuní' de Guayaquil"
Leer másEso, la separación natural que forma la cordillera de Los Andes entre nuestra costa y el resto del país, hace de esta zona un área única, con flora y fauna que no se encuentran en otro lugar. “Bosques secos como los nuestros solo se hallan en Perú y Ecuador. Son los ecosistemas más amenazados y menos conocidos del mundo. Hace falta compromiso de la ciudadanía y autoridades a favor de ellos”, reconoció el guía.
Judith Baquero, líder del grupo Guayaquil, de la fundación que organizó la jornada, contó que las caminatas por la naturaleza también se realizan en los bosques Paraíso, Palo Santo y Samanes.