El simulacro no incluirá evacuaciones de edificios para evitar aglomeraciones

El simulacro de terremoto, que se ha realizado de forma consecutiva ya por una década en Guayaquil, este año será diferente. La alcaldesa Cynthia Viteri aseguró que, teniendo en cuenta la presencia del coronavirus, la actividad, que se realizará este 13 de noviembre, no incluirá evacuaciones de edificios o empresas, para evitar cualquier tipo de aglomeraciones. 

En esta edición, la número 11, se realizará el Primer Ejercicio "USAR" (por sus siglas en inglés: Urban Search and Rescue) con equipos de búsqueda y rescate a nivel nacional. Serán unos 300 especialistas de varias provincias los que van a interactuar en escenarios reales con equipos del  Cuerpo de Bomberos de Guayaquil. Una vez dada la alerta de sismo, iniciarán sus operaciones para determinar las condiciones que puedan darse ante una posible emergencia.

“Hay que prepararse para eso, para trabajar y asistir a la ciudadanía en varios aspectos al mismo tiempo. Esto nos permitirá evolucionar el ejercicio a un nivel mucho más alto, destacó el director municipal de Gestión de Riesgos y Cooperación, Allan Hacay Chang.

Por tratarse de un ejercicio en conjunto, la Secretaria Nacional de Gestión de Riesgos facilitará al Cabildo dos vehículos Simuladores Sísmicos donde, las autoridades y la comunidad, podrán experimentar los movimientos telúricos del 16 de abril de 2016, cuyo epicentro fueron las provincias ecuatorianas de Manabí y Esmeraldas con una magnitud de 7.8°, y el de Japón, de marzo de 2011, que tuvo una magnitud de 9°. 

Dichos vehículos permanecerán en el parqueadero del Registro Civil Municipal aledaño al edificio de la Corporación para la Seguridad Ciudadana de Guayaquil, en la ciudadela Martha de Roldós.

Sobre la decisión de evitar las evacuaciones de edificios y empresas, la ciudadanía ha dicho estar de acuerdo. "Es lo mejor que puede pasar. Sería lamentable que por un ejercicio, claro que necesario, las personas se junten más de lo debido y el riesgo de contraer el virus aumente", aseguró Guillermo Palermo, habitante de la ciudadela la Garzota. 

Augusto Iturralde, de Ceibos, mantiene una opinión similar. Para él, de hecho, lo más idóneo sería retrasar la actividad. "Aun cuando me parece correcto que no se permitan las evacuaciones, creo que lo más oportuno era hacer el simulacro el próximo año, en el primer trimestre. Creería que puede esperar. Ahora lo más importante es limitarnos a salir, el virus parece que ha tomado nuevamente fuerza. Hay que estar más prevenidos que nunca", aseguró.