Las temperaturas extremas se volverán más frecuentes en Ecuador
Un estudio de la Universidad de Chile dice que el aumento será de 5 a 10 veces hasta el 2050 en países del trópico. El análisis incluye a Guayaquil.
Pronóstico para Sudamérica: los días con temperaturas extremas aumentarían de 5 a 10 veces hasta el 2050 en la zona de Trópico, donde está Ecuador. Esta alza será menos pronunciada en el Cono Sur del continente.
Así lo sostiene un artículo científico titulado ‘Observaciones y proyecciones de olas de calor en América del Sur’, elaborado por investigadores de la Universidad de Chile y publicado en el portal nature.com.
Las olas de calor se refieren a periodos de más de tres días consecutivos de temperaturas máximas. La previsión del estudio es que estas también se incrementen en la región.
Raúl Cordero, quien junto a Sarah Feron es uno de los autores, explica a EXPRESO que si bien el calentamiento global es algo que ya se ha advertido desde hace décadas, su estudio se centra en el aumento de la recurrencia de las temperaturas extremas y sus efectos.
“Por ejemplo, las temperaturas superiores a los 33° eran menos frecuentes que hoy en Guayaquil en los años 80. En el futuro esa misma temperatura será todavía más frecuente”, detalla el investigador.
“Por ejemplo, las temperaturas superiores a los 33° eran menos frecuentes que hoy en Guayaquil en los años 80. En el futuro esa misma temperatura será todavía más frecuente”.
El análisis toma los datos climáticos de Guayaquil y de otras ciudades muy pobladas de nueve países de América del Sur para estimar el incremento.
Estos datos muestran que el número de días con temperaturas extremas ya se ha duplicado en los últimos 30 años. Esto es similar a lo observado en otras ciudades tropicales de Sudamérica y del mundo. “Desafortunadamente, esta tendencia continuará hasta al menos mediados de siglo”, acota.
Eso depende de si se reducen o no las emisiones de carbono en la región y el mundo.
Tras revisar el artículo, Raúl Mejía, excoordinador local del Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi), dice que esas proyecciones son concordantes con el registro histórico de la temperatura en Guayaquil y con otras que se han hecho sobre los cambios en el clima del mundo.
No obstante, tiene reservas sobre la intensidad, esto es, un aumento de 5 a 10 veces de los valores actuales. A su criterio, al menos en Guayaquil y su entorno, considera más probable que sea de dos o tres veces.
“El tema es importante y debe llamar la atención”, dice Mejía, quien acota que un aumento de la frecuencia de temperaturas extremas tendría consecuencias directas en la salud de los habitantes y en casi todas las actividades económicas.
También coincide en que esos efectos serán mayores en las ciudades más pobladas, como en el caso de Guayaquil, rodeadas de cemento y asfalto que multiplican el calor.
Jonathan Cedeño Oviedo, oceanógrafo y docente investigador de la Espol, también cree importantes para la ciudad las proyecciones del estudio.
Según el trabajo, en el norte de Sudamérica se doblará la proporción de días extremadamente cálidos entre diciembre y febrero. En Guayaquil, el aumento sería de nueve veces.
Recuerda que en esta y otras ciudades ya se ha comprobado la presencia de ‘islas de calor’, esto es, de zonas urbanas donde la temperatura es más alta debido al cemento y el asfalto de pisos y calles; y de edificios que impiden circular al viento.
“Se ha reconocido que estas islas de calor podrían tener incidencia en la salud de la población, en especial de las personas más vulnerables, como los adultos mayores. Si a eso le sumamos estas perspectivas, la situación podría ser complicada de sobrellevar”, advierte.
El mapa de América del Sur que reproduce este Diario no consta en el artículo científico publicado, pero es un resumen hecho por los autores para una más fácil visualización y comprensión. Muestra de manera gráfica cómo se produciría ese aumento en el continente.
El #CambioClimatico incrementa la frecuencia e intensidad de las #OlasDeCalor haciendo q los récords de temperatura se rompan cada vez más rápido. Nuestro trabajo muestra q HemisferioSur no es la excepción https://t.co/HfYnjXe1pY https://t.co/czYSYfkUuG
— Antarctica.cl (@Antarcticacl) August 17, 2020
“Nuestras proyecciones no son alentadoras, pero debemos tomarlas como una motivación para la Acción Climática. Aún podemos evitar que se cumplan. Debemos descarbonizar el globo terráqueo”, insisten los autores, aludiendo a la necesidad de eliminar las emisiones.
Así lo pide también Jodie Padilla, catedrática guayaquileña certificada como ‘Líder de Realidad Climática’ por la organización del exvicepresidente de Estados Unidos, Al Gore.
“De los 20 años más calientes que ha tenido el planeta, 19 corresponden a este siglo. Los cinco más calientes registrados en la historia, son los cinco últimos (2015 - 2019). Y según datos científicos, existe una probabilidad de casi el 80 % de que este año sea el más caliente de la historia”, resalta.
Por ello, la docente investigadora de temas económicos de la Universidad Católica de Guayaquil, también llama a controlar las emisiones de carbono. “Los estragos de la crisis climática son más palpables desde la II Guerra Mundial y se debe al espesor atípico de la capa natural de gases de efecto invernadero. ¿De dónde viene la liberación exagerada de CO2 a la atmósfera? De la actividad humana basada en combustibles fósiles”, reitera.
LO QUE PODEMOS HACER:
- Más árboles. Lo primero es adoptar soluciones verdes, como elevar la cantidad de árboles, aconseja el investigador Jonathan Cedeño
- Menos reflectancia solar. Mejorar el albedo, que es la medida de la reflectancia de la radiación solar de los pavimentos y techos.
- Menos automotores. Limitar el tráfico vehicular, sobre todo en los ambientes urbanos densos.