Los trabajadores de línea de bus suspendida cuestionan la medida tomada por la ATM

"¡(Cooperativa) Río Amazonas también es pueblo, déjennos trabajar!", protestaban unas 100 personas, vestidas de blanco, en las afueras de las oficinas de la Agencia de Tránsito y Movilidad (ATM), ubicadas en la avenida del Bombero en Guayaquil este jueves.

Según estimaciones de los integrantes de esta cooperativa de buses urbanos, cerca de 280 colaboradores, entre conductores y dueños de buses, se han quedado sin ingresos tras la suspensión decretada por la ATM a comienzos de este año. Esto, sin contar que estiman que 45.000 personas utilizaban diariamente esa ruta.

La suspensión, según la ATM, se debió a que el contrato de operación venció el 31 de diciembre de 2024 y no fue renovado debido a incumplimientos por parte de la cooperativa.

Aseguran que se cumplió con los plazos

"El alcalde nos pidió los contratos, y sí los enviamos. Sin embargo, en pleno feriado del 31 de diciembre recibimos un comunicado diciendo que nos faltaban documentos. Esto no solo nos afectó a nosotros, sino a varias cooperativas más, a las que sí les dieron seis meses adicionales, pero a nosotros nos terminaron el contrato", explica y lamenta Cristina Argüello, dueña de un bus.

María del Carmen García, entre sollozos y lágrimas ocultas por sus gafas, estaba desolada. Había trabajado en España durante años para poder comprar un bus aquí, y este año se ha quedado sin ingresos. "Le pido al alcalde, encarecidamente, que se ponga la mano en el corazón y nos permita trabajar. ¿Por qué tanta represalia contra nosotros? Nos vamos a morir de hambre", lamentó.

Álex Gutiérrez, conductor de la ruta 54 perteneciente a esta cooperativa, trabajó en esa ruta durante 12 años. "Nadie esperaba esto. De un día para otro dejamos de trabajar. Los choferes vivimos al día y tengo un hijo que se enfermó estos días; ya he tenido que pedir prestado. Todos tenemos derecho al trabajo, no pueden quitárnoslo", dijo.

José Quishpe, quien viajó desde su natal Chimborazo al Puerto Principal para trabajar como chofer desde hace 20 años, considera que los conflictos previos, que incluso llevaron a un paro de buses urbanos en 2024, podrían ser la raíz de la suspensión.

"Deje trabajar, señor alcalde, por favor. Río Amazonas ha cumplido 61 años de servicio y nos quieren quitar de aquí, no sé si por odio o venganza que tendrá con el presidente de la FETUG, Christian Sarmiento", mencionó.

Los miembros, abogados y dirigentes de esta cooperativa esperaban un diálogo prometido por la ATM este 9 de enero para tratar de solucionar este problema; sin embargo, informaron que la reunión se ha pospuesto.

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