Sus apodos venden más que sus nombres
EXPRESIONES le muestra a un grupo de reporteros y presentadores cuyas personalidades se reflejan en los apodos por los que son conocidos.
Sin duda estos rostros conocidos por muchos consumidores de la televisión y los espacios digitales se han ganado un espacio en el periodismo de farándula del país.
La Veneno
Con este sobrenombre se conoció hace 30 años a un famoso transformista español. Pero en Ecuador, si alguien pronuncia el apodo de La Veneno, viene enseguida la imagen de Silvana Torres, la presentadora de De boca en boca. Sus comentarios y reportajes, con dardos incluidos, la han hecho muy popular en la farándula ecuatoriana. Eso sin contar que siempre pelea por conseguir la primicia.
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Su peculiar corbata de lazo es su distintivo. Siempre de traje formal, Leonardo Quezada, mejor conocido como El Lazito de la Farándula, con su suave voz y sonrisa amable ha causado varios terremotos tanto en su querida provincia natal de El Oro como en el Guayas. Sus comentarios, entrevistas y reportajes no han caído nada bien a más de uno.
El Cuy
Varias veces han sido las ocasiones en que Mauricio Altamirano se ha despedido de la farándula, pero no ha podido. El bichito del chisme lo lleva en la sangre. Al Cuy hay que reconocerle su frontalidad y llamar a las cosas por su nombre, sin miedo ni favor cuando el caso lo amerita.
La Víbora
Jomahira Ganchozo es la más joven de este grupo, pero no por eso ha estado exenta de polémica. Sus desencuentros con varios de sus colegas en los programas digitales de espectáculos con dosis de ‘ubicatex’ han sido noticia desde que hace un año esta actriz decidió presentar información del espectáculo en la que no deja títere con cabeza.
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“He intentado ser bochinchera y no me sale”, dijo en alguna ocasión a este medio Evelyn Vanessa Calderón, conocida en Salitre y en el resto de Ecuador como La Coqueta del Cerro. Su sonrisa de Gatúbela, voz de locutora sexy y piernas tucas son parte de su seducción.