La Banda Sinfónica Metropolitana busca un director
Los finalistas son de Argentina, Colombia y Ecuador. Cada músico ofreció un recital
Un animado pasodoble inunda el teatro y transporta a los asistentes a las tierras más allá del Atlántico. Pero esta pieza, titulada Vuelva a Paipa, es nada más y nada menos que una creación de un compositor japonés, interpretada por un director colombiano; el epítome del mestizaje. La pieza la dirige Christiam Malagón, uno de los tres aspirantes a director de la Banda Sinfónica Metropolitana, quien llegó al país a ofrecer un concierto-audición con el que espera asegurar su triunfo.
Y es que tras siete meses sin titular, la Fundación Teatro Nacional Sucre ha optado por un formato poco convencional para seleccionar al nuevo director musical de este ensamble, que tiene 33 años de antigüedad.
Así lo explica Simón Gangotena, director musical del teatro: “Queríamos contar con un proceso transparente, documentado y que tome en cuenta las distintas aristas necesarias para cumplir con este cargo”.
El proceso de selección empezó a mediados de marzo y la convocatoria fue un éxito. Dieciséis postulantes de países como Cuba, Chile, Argentina, Colombia y Ecuador ingresaron al proceso y en una preselección fueron elegidos diez aspirantes. En el jurado estaban tres representantes del ensamble.
“Es la primera vez que los miembros de la Banda Metropolitana participan en la selección, pero nos importaba darles voz y voto y que tengan una verdadera incidencia en la elección”, dice.
TRES CONCIERTOS, TRES DIRECTORES
El ecuatoriano Edison Gualotuña, el argentino Jorge Dumont y el colombiano Christiam Malagón llegaron hasta el final del proceso.
“Además de la técnica, conversamos con ellos para conocer la visión que tenían para la Banda”, indica Gangotena. “El director no solo debe pensar en el aspecto musical, sino en cómo tener mayor incidencia en la ciudad y en cómo recuperar los públicos que asisten a los teatros, algo que se han reducido”.
La última fase fue reunir a los músicos en la capital, donde cada uno de ellos ofreció un concierto y tuvo la oportunidad de trabajar con los músicos del ensamble.
El primero en presentarse fue Gualotuña, quien actualmente es director artístico de Sinfonía para la Vida en Esmeraldas. Él dio un recital enfocado en la música académica.
Dumont le siguió. El director, que dirige la Orquesta Sinfónica de la Provincia del Chaco, presentó un recital con piezas como Flashing winds, de Jan Van der Roost, y el afamado Amazing Grace, de John Newton.
Finalmente, Malagón se presentó en el Teatro Capitol, donde intercaló la música académica con piezas regionales como Fantasía guaneña, de Nicanor Díaz y Lisandro Pabón.
Durante una semana, el ensamble pudo compartir con cada uno de los directores. “Ese tiempo fue vital, porque permitió que los músicos y los directores pudieran trabajar juntos y evaluarse mutuamente. Sin este proceso es muy difícil saber cómo se desenvolverían juntos a futuro”, sostiene Gangotena.
LA DECISIÓN FINAL
La próxima semana, el jurado evaluará los resultados de los recitales, las entrevistas y la votación interna del propio ensamble para tomar una decisión definitiva. Se espera que esté lista para el lunes 8 de mayo, tras lo cual se anunciará públicamente.
De acuerdo con el calendario programado, se estima que el director elegido empezará a laborar con los músicos a fines de ese mes o a inicios de junio.
DOS ÓPERAS EN CAMINO
Mientras se define el calendario del ensamble para el resto del año, cuyas presentaciones las definirá el director elegido, la Banda Sinfónica Metropolitana participará en dos grandes producciones del Teatro Sucre para los dos últimos trimestres del 2023.
La primera, en el marco de la celebración del 10 de Agosto, es el Tríptico Quiteño, una ópera de estreno mundial que reinterpretará tres leyendas de la capital.
La segunda es la Temporada de Ópera del teatro, evento anual que se lleva a cabo con la participación de todos los ensambles de la fundación cultural.
Este año, músicos y cantantes pondrán en escena una zarzuela que se trabajará en coproducción con entidades españolas y colombianas.
UN ENSAMBLE EMBLEMÁTICO
En 1990, La Banda Sinfónica Metropolitana de Quito surgió con un objetivo claro: transformarse en una orquesta dinámica de vientos capaz de abordar repertorio popular y académico.
El ensamble pasó a ser administrada por la Fundación Teatro Nacional Sucre en 2005, y el Centro Cultural Mamacuchara, espacio de la fundación, se convirtió en su sede emblemática.
Conformada por 34 músicos, la Banda Metropolitana ha participado en importantes montajes, como la primera grabación hecha en Ecuador de la obra Atahualpa o el ocaso de un imperio, de Luis Humberto Salgado, y en festivales como Jazz in Situ, Ecuador Jazz, Conciertos y Veladas Libertarias.
El carácter multifacético del ensamble le permite participar en producciones de múltiples géneros, y si bien su nuevo director será el que decida los objetivos a futuro, ya se encuentran definidos sus retos para este año: continuar con los conciertos en los barrios de la urbe y en los tres teatros de la fundación.
L0S FINALISTAS
Christiam Malagón (Colombia)
Es licenciado en Música de la Universidad Pedagógica Nacional y magíster en Dirección Sinfónica de la Universidad Nacional de Colombia. Dirige el programa sinfónico de Tunja, Boyacá, de Colombia.
Jorge Dumont (Argentina)
Estudió Dirección Orquestal en la Universidad Nacional de las Artes de Buenos Aires y es magíster en Investigación Musical por la Universidad de La Rioja. Dirige la Orquesta Sinfónica de la Provincia del Chaco.
Edison Gualotuña (Ecuador)
Estudió en el Conservatorio Nacional de Música, en Quito, y se especializó en la Academia Latinoamericana de Clarinete en Venezuela. Es director artístico y académico del programa Sinfonía por la Vida en Esmeraldas.
