La Bombón: "En RTS no se preocuparon por mí"
La presentadora y concejala ahora en TC. A EXPRESIONES le revela cómo es su relación con Cynthia Viteri, Úrsula Strenge y Gustavo Navarro.
Tras dos años en RTS, la presentadora y concejala Mayra Montaño, conocida como La Bombón, tomó la decisión de cambiarse de ‘casa’ televisiva, a TC. El lunes 16 de agosto debutó en los espacios 'DespiérTC' y 'El Noticiero', segunda emisión. Antes de RTS, estuvo casi siete años en Canal Uno.
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Leer másNacida en Esmeraldas, no revela su edad. Wikipedia dice que solo tiene 45 años. No le importa el qué dirán, es de temperamento fuerte y no se muerde la lengua al hablar. Más de una vez ha ‘metido la pata’ al aire y sus frases (como “Levántate, pacharaco ocioso”) son parte del vocabulario popular.
Ha perdido peso. “No he hecho dieta, a veces como a deshoras, además soy hipertensa, no me confío y por ello estoy medicada. Por mi carácter en ocasiones se me dispara”, cuenta. Solo tiene dos hijas: Yajaira y Carmen Palacios Montaño. “He sido floja y antes no daban bono”, añade entre risas.
Entre usted y el gerente general, Rafael Cuesta, se dieron muchas conversaciones, hasta que su ingreso se hizo realidad...
Me enamoraron, me conquistaron… Rafael conversaba conmigo, que hoy sí, mañana no. Yo le decía: “Espera, déjame hablar por acá”. Fue como una tentación a lo prohibido.
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Leer más¿Es decir que se dejó tentar?
Como los enamorados cuando dicen “yo no quería”, pero bien que les gustaba a los dos. En la TV nos dejamos llevar por los retos, quería darme ese gusto porque sé que puedo y tenía que intentarlo.
Sé cuál es mi potencial y hasta dónde llegar. Muevo masas porque manejo el acercamiento con la gente, soy espontánea. Poseo la chispa, la capacidad de dialogar, reír y mi mensaje llega a los estratos sociales alto, más bajo y tirando para el sótano. Me buscaron y yo también quería.
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Muchos factores se ponen en una balanza en estos casos. Claro que la propuesta económica jugó un papel importante. Decir lo contrario sería mentir o ser hipócrita. Algunos afirman que no se mueven por el dinero. Eso es una mentira. Si se presenta una oportunidad para crecer, hay que considerarla. Ahora en los trabajos no existe estabilidad, pero busco más proyección, más espacio y una vitrina.
Hay quienes dicen que el presidente de la República, Guillermo Lasso, la llevó a TC.
Con Guillermo no he hablado desde antes de las elecciones que él ganó. Aunque hemos conversado, lo mío siempre son conversaciones. Soy fiel al líder, Jaime Nebot. No faltarán los enfermos que seguramente quieren que pelee con Nebot, pero él conmigo nunca peleará porque sabe que soy la única mujer que caminó por nada. Cuando se hace eso es porque no existe interés, lo único que se quiere es sumar. Lo respeto. Aunque si me dice que me tire de cabeza al río, no lo haré porque sé que voy a morir (risas).
¿Para qué quiere una mayor vitrina?
Para sentirme útil, que se vea a La Bombón como la amiga, la mujer humilde y sencilla, que dando tropiezos ha buscado estabilizarse y la felicidad. El ejemplo que doy a la nueva generación es el de una mujer de pueblo que ha surgido.
Cuando Úrsula Strenge supuestamente se iba a quedar en RTS, ¿usted pegó el grito al cielo porque a ella le iban a hacer una mejora económica?
Hay que ponerse en el otro lado de la orilla para entender a La Bombón. Cuando llegué a RTS, el canal tenía un rating bajo. Ellos vieron en mí un potencial, a una persona que llegaba a sumar, no a restar. Gracias a Dios mi trabajo tiene respaldo. Todos los que trabajamos lo hacemos por recibir una remuneración, una cantidad ‘equis’ de dinero.
Se habló de que según cómo se desenvolviera La Bombón, se le reconocería una mejora. Cuando tengo una persona en mi casa para que me ayude, le digo que le pagaré determinada cantidad y que le reconoceré un billete más según la manera de desenvolverse. Si no hace méritos se quedará con lo mismo. Yo sumé, sumé y sumé en RTS. Úrsula llegó después de mí, llegó como la reina, en eso no me meto; pero hay que ver cuáles son las reinas que suman.
Una frase popular dice que “el que no llora no mama”.
Uno de mis defectos es que no me gusta andar tocando puertas. Considero que si estoy trabajando bien, merezco que aquello sea reconocido y valorado. Soy de las madres que no esperan que un hijo llore para darle de comer.
¿En RTS están resentidos con usted?
Cito un ejemplo a mi estilo. Una mujer se pone guapa, se perfuma, viste otra ropa, entonces un sapo del barrio de los que nunca faltan le dice al marido que esté pilas porque ella en algo anda y que le coquetea al vecino. Este no hace caso, entonces se quedará como el cachudo confiado, el cual la mujer se le fue con otro. Ella hasta por coraje se le va porque nunca le prestó atención. En las redes sociales sacaron una imagen de Caterva, El Cholito y La Bombón.
La gente me preguntaba, pero ellos no decían nada, no se preocuparon por mí. No faltaron algunos dizques compañeros que crearon un ambiente tenso cuando se enteraron que me pretendían. Creían que si La Bombón se iba, me iban hacer una maldad a mí y un favor a ellos. Claro que también hice amigos, me refiero a los que llaman la clase obrera.
¿Pero a su exdupla José Luis Arévalo sí lo extrañará?
Él es otro cantar, cuando llegué compartía con Luisa Delgadillo. La Bombón tiene su estilo, de mujer real y con su esencia. Impuse mi estilo no solo en RTS. La TV nunca tuvo tanto sabor hasta que llegó La Bombón. La cambié con baile, risas y comentarios. No seré la mejor, lo reconozco, pero soy diferente.
¿Dejará hablar a Caterva y al Gitano o se quiere robar la película?
Caterva es tranquilo y domable. La vida nos enseña a aplicar la psicología. Tendrá su debilidad como cualquiera, yo también tengo mis aires de diva (risas). Por ejemplo, cuando me peinan y me dejan mal, les digo que pueden hacerlo mejor. Estas cuatro extensiones que llevo no me costaron dos reales, no por un descuido me las van a quemar y luego van a apestar a fogón de vieja. A la que inventó el ascensor no la van a mandar por las escaleras, no como cuento.
Por respeto al público debemos dominar nuestros caballos. A bajar la adrenalina, no lo someteremos a una jauría.
Aparte de los informativos, apareció en 'De casa en casa' para resolver casos de la calle.
Comparto con Caterva y Jorge Rendón, pero en mi contrato no está 'De casa en casa'.
Seguramente es una estrategia para golpear a la competencia.
Yo estaba de arrimada, ese día pasaba por ahí y me llamaron. La TV es como el amor y el fútbol: la pelota está en la cancha, hace goles no solo el que quiere sino el que puede. A la audiencia hay que saberla atrapar.
Se dice que usted y Gustavo Navarro no se pueden ni ver.
Nunca hemos peleado. El temperamento de Gustavo es como el mío. Nos hemos mandado a donde usted ni se imagina, pero seguimos siendo amigos. A veces chocamos. Gustavo con sus locuras tenía la costumbre de que a todas les hacía la vida imposible, era su forma de ser (risas). Era el temido Gustavo Navarro. Me inventaba amoríos o que yo mantenía a mi yerno que vivía en España.
¿Existe alguien que le ‘caliente la oreja’?
Estoy más sola que el Llanero Solitario. Hay algunos que andan detrás de la casa y el carro, quieren vivir a vaca. ¡A mamá no la sorprenderán, a estas alturas del partido! No necesito de un hombre para ser feliz.
Se dan casos de mujeres que prefieren a los más jóvenes, como sucedió con Úrsula Strenge...
Es bueno el ‘colágeno’. Sentirse sola tal vez hace que una persona busque pareja. Además, al cuerpo hay que darle lo que pida, si este pide ‘canchis canchis’ o ‘guinguiringongo’, hay que dárselo (suelta una carcajada).
Su armario parece que es amplio y variado.
Una de mis debilidades es la ropa. Me compro además carteras y zapatos. Para ir de ‘shopping’ no necesito ocasiones especiales. Me encanta la palabra ‘oferta’, cuando salgo regreso cargada. Me pongo lo que me gusta y me hace sentir cómoda. Puedo usar algo de la bahía o de marca. Soy exigente, conmigo no funciona la marca ni la ropa, yo soy la percha. Algunos gastan mucha plata, pero no les luce tan lindo como a mí (risas).
¿Políticamente hasta dónde quiere llegar, ser Alcaldesa de la ciudad?
¡Nooo!, allá que se peleen entre ellos, allá entre blancos… La proyección de La Bombón da para ser prefecta, alcaldesa o concejala. No estoy interesada, nunca me quitó el sueño ser Alcaldesa. Fui la concejala más votada en Guayaquil, aquello me daba para ocupar el cargo de vicealcaldesa. Pero según las leyes no pueden estar dos personas del mismo género. Sin embargo cuando son hombres se les permite. Hasta ahora no sé si son las leyes o machismo. Mucha gente se ve representada por La Bombón. Luego de la Concejalía será lo que Dios quiera.
¿Cómo es su relación con Cynthia Viteri?
Normal. Como lo es con algunos concejales. Después de saborear la Alcaldía de Jaime Nebot, el pueblo la eligió y quiso a una mujer al frente de Guayaquil.
¿También se tatuó la piel como ella?
Me hice un tatuaje en el tobillo izquierdo, hace un montón de tiempo, cuando mi segunda hija era chiquita. Es un yin-yang. Me lo hicieron ‘pelo a pelo’. Casi me orino del dolor. Siempre he querido hacerme un tigre en la espalda. No me lo hago porque pensarán que estoy copiando.