Carlos Luis Andrade invitó a todos sus seguidores a su fiesta de cumpleaños
El conductor de tv cumple hoy 41 años y lo festejará por Instagram Live. Su hijo Joaquín también será parte de la celebración por ser el Día del niño.
En el hogar de Carlos Luis Andrade y Gaby Díaz, hoy, la celebración es por partida doble: el conductor de televisión cumple 41 años y es el Día del Niño. En su cuenta de Instagram subió un post para todos sus seguidores invitándolos, a las seis de la tarde, a su fiesta virtual mediante un en vivo en esa red social.
Pero será Joaquín quien disfrute más este día, ya que su papá le ha decidido, como cada año, parte de esa celebración en la que no faltarán el arroz con menestra de lenteja y cuero de chancho, carne asada y patacones.
De la pantalla a Tik Tok
Leer más"Siempre celebramos el Día del Niño por dos, es como si fuera también su cumpleaños", dijo Andrade, quien califica a su retoño, próximo a cumplir tres años, como un niño con gran sentido del humor, emprendedor, curioso, de carácter fuerte y muy feliz.
Sus padres lo están criando para que tenga todas esas cualidades, más allá de que si decide o no estar en la televisión. Carlos Luis afirma que tanto él como su esposa, la conductora del programa En contacto, de Ecuavisa, ven en su pequeño habilidades naturales y características para seguir sus pasos. "Es histriónico, preguntón, explorador y está siendo formado para que desarrolle las habilidades que nosotros tenemos", aseguró Andrade, quien al momento se dedica a dar charlas y cursos como coach PNL.
A Joaquín le gusta construir cosas, y disfruta darle vida a sus juguetes con los que crea personajes distintos con características y voces diversas. Su mejor amiga de aventura es la mascota de la casa, Yuca, con la que juega y lo acompaña todo el día. Su hermana Poly, de 12 años, lo ama y cuida, pero los separa la diferencia de edad. Empezó clases on line en el jardín inicial.
El programa De boca en boca y los dramatizados preparan su regreso a TC televisión
Leer másDurante la cuarentena, Carlos Luis le pidió a su familia que evitara anteponer la palabra no en lo que hacía el niño y que mejor la sustituyeran por acciones. "Nos dimos cuenta que encerrado andaba explorando. Cambiamos el lenguaje. En lugar de decir no corras, le decíamos 'Anda despacio' o 'Tranquilo', por no saltes, porque creemos que el lenguaje muchas veces influye en el espíritu de los niños y vemos gente que en la adultez no se atreve a hacer cosas por todo los no recibidos en la infancia", sostuvo el manabita, quien descubrió que su pequeño hijo es enamorado del sabor de la sal prieta, alimento que nunca falta en su hogar.