Carolina de Mónaco y Carlota: ¿Madre e hija están distanciadas?
A la hermana del príncipe Alberto no le agradó que Carlota revelará intimidades familiares en una entrevista
La relación entre Carolina de Mónaco, hermana del príncipe Alberto, y su hija, Carlota Casiraghi, está en la mira. El portal alemán Bunte asegura que existe distanciamiento entre madre e hija.
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La hija de Rainiero de Mónaco ha preferido la discreción y se ha mantenido al margen de polémicas. No está contenta con la reciente entrevista de su hija para The Telegraph. En esta conversación, Carlota habló sobre temas cómo su papel en la familia real de Mónaco, el vínculo con su madre, su separación o cómo lleva la maternidad.
Aunque no hay confirmación oficial del distanciamiento entre ambas, desde que se publicó esa entrevista los actos conjuntos se han reducido. A Carolina se la vio con su otra hija, Alejandra de Hannover visitando el Espace Léo Ferré, para conocer la obra de este artista monegasco.
Una de las primeras afirmaciones que sorprendieron es que la hermana de Pierre Casiraghi admitió que ella solo se implica en sus responsabilidades en Mónaco si tiene un objetivo concreto o es muy importante para su familia, según revista Lecturas.
De no ser por estas dos situaciones, la joven asegura que podría prescindir de la atención mediática y de ser hija de figuras públicas. "Esto conlleva presión, la gente te juzga y espera mucho de ti cuando tienes un estatus oficial. Prefiero ser libre", afirmó. Además habló directamente de su deseo de "desvincularse de su estatus real".
Lo considera una traición
Algunas fuentes cercanas al principado de Mónaco aseguran que la princesa interpretó las palabras de su hija como una traición.
Otros de los temas que mencionó fue la relación con su madre. "No quiero revelar necesariamente todo lo que pasa entre nosotras, pero siempre es ambivalente", confesó a la revista Town & Country. El vínculo mejoró al tener a sus propios hijos, Raphaël, fruto de su noviazgo con Gad Elmaleh, y Balthzar, nacido de su matrimonio con Dimitri Rassam, de quien se ha divorciado este mismo año. "Fue liberador. Por supuesto, tienes más empatía y entiendes más cosas".
Pero, Carolina tampoco mantendría una buena relación con Pierre y Andrea Casiraghi. Las mismas fuentes dicen que se debe a la férrea presión que ha ejercido sobre sus hijos a lo largo de los años.
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