Crítica de cine. Moana 2, ¿Por qué verla?

Tras recibir una llamada imprevista de sus ancestros, lobos de alta mar, Vaiana tendrá que viajar a las lejanas aguas de Oceanía, adentrarse en peligrosos y olvidados piélagos a fin de luchar contra circunstancias inesperadas.

En la travesía la acompañarán Matangi, en el fondo su antagonista, la pequeña Simea, hija de Grab, jefe Tui, de Tautai Vasa, uno de sus antecesores y residente en el villorrio ubicado en Montaui. También están Heihei, el gallo tontón e idiota del pueblo y Maui, un semidios bullicioso y guardián de la humanidad. Sin olvidar a Pua, leal cerdo mascota, “con el brío de un cachorro y el cerebro de un perrito”.

La crítica de Moana 2

Prepárense para adherirse a una pantalla que, al encenderse, los hará creer que están dentro de una gigantesca habitación y que al cerrar su puerta explotarán cientos de bengalas multicolores, música pegajosa y personajes tan individuales que bien podrían servir de base a nuevos filmes.

Todo esto agrupa Moana 2, un animé de Walt Disney que asombra, no solo por su encantamiento sino porque sus paisajes terrestres, aéreos, marinos o submarinos repiten la preciosidad de la naturaleza, que la engrandece con la magia de sus colores, tonos que vaporizan lo terrenal o acuático para convertirlos en cristales arrastrados por el vendaval de su puesta en escena. 

Lo mismo ocurre con su energía, del híper activismo de sus héroes o esas olas espectrales que rememoran el deporte del surf, aunque no sea visto en secuencia alguna. 

Si bien la publicidad afirma que los pendones fueron tomados en Hawái, me permitiría aseverar que más bien provienen de la Polinesia francesa, de Tahití y sus islas, específicamente de Bora-Bora, cuyo mar o lagunas tienen ese verdor, esas tonalidades en sus arenas, de peces cuyas escamas brillan cual si tuviesen la fosforescencia que despunta al utilizarse aquella luz negra que en una época incendiaron las discotecas.  

Ventaja del filme es que, al resaltar sus cualidades, el “celuloide” se transforma en una obra pictórica de loable maestría, como si esta fuese una pintura de Rembrandt o Tábara. Así verán ojos llamativos, tatuajes que de ser luces se truecan por los que usualmente exponen ciertos grupos de la juventud. 

Constelaciones estelares que semejan el infinito, cabelleras tan bien logradas que parecen hebras naturales, expresiones humanas que sobrepasan sus bosquejos. Atardeceres y amaneceres que, valiendo las comparaciones… son imágenes de nuestra naturaleza, solo que aumentadas por sus reflejos.

Tal la perfección, así como la de sus “personajes”, que traen a la memoria lo que publicó la revista estadounidense llamada TIME, en la edición correspondiente a la primera semana de este siglo XXI: “Llegará un momento en que la técnica digital hará que, en ciertas ocasiones, no será necesario el contratar actores o artistas, porque ellos serán suministrados por el tecnicismo”. 

Temo que el momento se aproxima, las canciones, como todo lo actual, es energía con sesgos de romanticismo y esa montaña o volcán apagado adquiere con sus trazos el misticismo de las cosas hieráticas. ¿Qué le hace falta? Una dosis de masculinidad porque la trama es decididamente feminista y quizás ello no satisfaga a los chiquillos que la vean. 

Calificación: * * * *

También se estrena Criaturas: líneas de extinción

Criaturas: Líneas de extinción es una película de acción dirigida por George Nolfi y escrita por Kenny Ryan y Jacob Roman. El filme tiene una duración de 91 minutos y está protagonizado por Anthony Mackie, reconocido por interpretar a Falcon en el Universo Cinematográfico de Marvel, y Morena Baccarin, quien también ha participado en producciones de Marvel. Completan el elenco Maddie Hasson y Tony Goldwyn.

La historia sigue a un padre soltero y dos mujeres que, arriesgando todo, deciden abandonar la seguridad de sus hogares para enfrentarse a criaturas monstruosas con el objetivo de salvar la vida de un niño. La película promete una mezcla de acción y tensión, explorando los límites de la supervivencia en un mundo lleno de peligros.

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