Habita una casa con dos siglos de historia
En Mulaló sigue en pie una vivienda que resistió la erupción de 1877
Mulaló, cuya traducción significa ‘Tierra de Caracoles’, aún aguarda en sus límites casas y haciendas patrimoniales que han resistido las inclemencias del tiempo e incluso la última erupción del Cotopaxi de 1877, según la historia.
Una de ellas es la residencia donde habita Flor Calvopiña, que está situada en la calle principal, a dos cuadras del parque central de esta parroquia de Latacunga. Flor tiene 72 años y adquirió la vivienda hace cinco décadas. Mencionó que primero llegó a arrendarla, pero después la dueña accedió a venderla.
Explicó que se enteró de que era patrimonial cuando observó en su ventana una notificación que le dejaron de la Municipalidad, señalando que la estructura estaba entre las reliquias de la provincia y el país, pues su construcción data de unos 200 años.
La propietaria mencionó que ha realizado adecuaciones, pero manteniendo la fachada original. La vivienda fue construida con piedras de anteriores erupciones volcánicas, entre ellas la piedra quemada.
Antes que Flor se radicara en el sitio, la estructura era utilizada como escuela y mucho antes como Casa del Pueblo. La dueña aseguró que desde que la habita ha vivido temblores y las inclemencias de la naturaleza. “Mi casa es como una fortaleza, muy resistente a todo. Es una de las más antiguas de Mulaló. Solo espero que las autoridades ayuden a mantenerla para conservar la historia patrimonial”.
María Veloz, presidenta de la Comisión de Patrimonio Municipal, manifestó que está prohibidos derrocar los bienes que son declarados patrimoniales. El cantón tiene registros de 240 bienes muebles, y en la provincia hay más de 600.
Nelson Ávila, presidente del Gobierno parroquial, sostiene que Mulaló es una de las parroquias más antiguas del callejón interandino, con más de cuatro siglos. En 2021 fue declarada zona arqueológica.
Algo de historia
Esta parroquia rural de Latacunga está habitada por unas 15 mil personas. En sus manifestaciones culturales predomina el carácter religioso ancestral y costumbrista. Sus festividades de fundación y patronales datan de 1535, cuando se dio el traslado al lugar de su patrono, san Francisco de Asís. En su historia destaca una fecha: el 13 de mayo de 1822, cuando recibió con alborozo a las huestes libertadoras del general Antonio José de Sucre.
