Las voces femeninas y el rock destacan en el Sucre Viajero
Orquestas andinas, sinfónicas y una banda de pueblo acompañarán a los artistas en Lumbisí y en el parque El Arbolito
El jueves 25 de julio, las cantantes Iraiz Oviedo, Andrea Cóndor y Ángela Valencia ensayaron en el Centro Cultural Mamacuchara para un ensamble con la Orquesta de Instrumentos Andinos (OIA). Para los instrumentistas, que trabajan bajo la batuta de la maestra Jéssica Cárdenas en ese lugar de la Loma Grande, han sido tardes de preparación del Sucre Viajero.
El festival, que en esta edición rendirá un homenaje a la música nacional, se inició la semana pasada en el Complejo deportivo de la Liga Barrial Matilde Álvarez, al sur de Quito. El cartel reunió a tríos (Quimera, Yavirac, Pambil y Los Garles) con una muestra de su repertorio, en un escenario montado junto a la Placita del Viajero, una feria de emprendimientos en la que se desarrollan diversas actividades. Se presentó una banda de pueblo y el grupo Imagino Teatro puso en escena la obra Andes, la ruta de los sueños.
Este sábado, 27 de julio, la estación para el montaje dirigido a público de todas las edades estará en la Plaza de la Identidad de la Comuna Lumbisí, al nororiente de la ciudad.
A las 15:00 se abrirá el recinto ferial, a las 17:00 habrá una función de Andes (dirigida por Santiago Carcelén), y a las 18:00 actuará la banda Virgen La Dolorosa de La Roldós.
El repertorio que han ensayado Oviedo, Cóndor y Valencia es una muestra de la música local. En la segunda parte del concierto, un bloque musical que empezará a las 19:00, también se presentará La Toquilla.
Una estación de voces femeninas
La mezzosoprano Andrea Cóndor cuenta los detalles del repertorio desde el Parque Itchimbía, antes de ir a uno de los ensayos en el centro. De la música popular latinoamericana, la OIA ha elegido canciones de Violeta Parra, Mercedes Sosa y Chabuca Granda. Del folclor ecuatoriano también han hecho arreglos para que los interpreten las solistas Iraiz Oviedo y Ángela Valencia. El repertorio tendrá a cada cantante en escena y, al final, su presentación juntas.
Entre las actividades que activarán cada escenario, habrá juegos infantiles (rayuela, elástico) para las familias que quieran ver a los artistas. “Será una gran oportunidad para salir de la rutina”, comenta Cóndor, quien además es productora independiente. Este año anunciará la ópera Carmen, que cuenta la historia de un femicidio, en el Teatro San Gabriel. La maestra Andrea Vela dirigirá el ensamble de música flamenca, coros de niños y adultos. Se confirma que la música lírica es un prolífico reducto del arte en el país.
Con su tradición centenaria de lutieres y saberes únicos en su género, la OIA está integrada por Rolando Campuzano y Rubén Vásquez (en los bandolines); Luis Guevara y Marco Chiquisala (charangos); Alejandro Guerrero y David Tamayo (bandola ecuatoriana); Marco Flores y Danilo Vizuete (flautas de pan); William Estrella, Félix Castañeda, Stalin Males, Orlando Mejía, Byron Morales y Julio Noroña (zampoñas); Eduardo Herrería, Edynson Piñeiro, Alfredo Amaquiña, Patricio Valdivieso y Jorge Cela (guitarras); Milton Castañeda, Xavier Hurtado y Alexis Zapata (quenas); Carlos López, Jorge Villota y Cristian Moreno (percusión) y Esteban Rivera (bajo).
La última parada del festival
Desde Latacunga llegará el cuarteto Narviko para la jornada final del Sucre viajero 2024. La banda liderada por el músico y poeta Víctor Hugo Narváez, fundador de Sal y Mileto, también actuará ese día en el Parque El Arbolito, del centro norte capitalino. El trío conformado por Igor Icaza, Franco Aguirre y Luis Enríquez hará un ensamble con la Banda Sinfónica Metropolitana y el Coro Mixto Ciudad de Quito.
Narviko tiene al mítico compositor de piezas clave del rock libre ecuatoriano -como Panelita, El viaje, Mi fusil o Anaís- en la guitarra electroacústica y rítmica; el baterista es Patricio Orbea, José ‘Gato’ Garcés es tecladista y Sebastián Torres, el guitarrista principal que dirige el proyecto y hace los arreglos.
La música y las letras son obra de Narváez, autor del libro Memorias de un rockero, que agotó el centenar de sus ejemplares y se ha convertido en otra de las piezas del culto al género.
De un repertorio de treinta temas, han seleccionado ocho que van del pasillo, blues, bambuco al bossa nova. La renovación y libertad son constantes, como en Mileto, a quien Narváez ha acompañado en otros recitales, como Loa Loa Fest o Diablo en llamas, además de sus años iniciales. Van a cumplirse tres décadas de la fundación de la Banda de los Hornos.
Vacío es un tema que habla de un tren. Se inspiró en la chatarra que ha quedado sobre los rieles de Huigra, en Chimborazo. “Ver esos vagones, botados, me dio mucha pena. Hice un poema y le puse música”, cuenta Narváez mientras recuerda el gusto en el público que ha sentido la intensidad de esa composición que ejecuta con Narviko. Susurro es otro de los picos destacados del cuarteto, que ha tenido un recorrido por diversos caminos de la música de vanguardia.
3Vol también estará en cartelera. Esta semana, publicaron en la plataforma YouTube una muestra de su puesta en escena, grabada en directo en el Teatro San Gabriel el clip muestra la interpretación de su Efectos secundarios. El trío lo componen Jordan Naranjo (bajo/voz), Steve López (guitarra/voz) y Zak Icaza (batería).
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