Cybergrind: rapidez, agresividad y melodía

Es inevitable usar etiquetas para tratar de entender y clasificar toda la gran diversidad de sonidos que podemos crear los seres humanos. Así surgen nombres de géneros, subgéneros y un montón de híbridos, que muchas veces no tienen fronteras claras entre sí.

Pero las etiquetas son engañosas, porque un mismo estilo puede cobijar a bandas que si bien tienen características en común, son distintas las unas a las otras, en lo sonoro, en lo lírico y también en lo estético.

Esta semana le recomendamos cuatro proyectos de cybergrind, estilo que mezcla la velocidad y voces guturales del grindcore con la música electrónica. Podríamos decir que se trata de la evolución natural del metal industrial, que ya le imprimió agresividad a la música hecha con máquinas, pero el cybergrind acelera aún más ese sonido.

Además, obviamente este género no se desarrolla aislado de otros, sino que convive de forma espontánea con otras corrientes que con el tiempo están teniendo mayor relevancia en el ecosistema subterráneo, como 8-bit (inspirado en los videojuegos de antaño), nintendocore (8-bit en plan salvaje), synthwave o breakcore. El cybergrind no le hace el feo a ningún estilo.

EXPRESIONES lo invita a no temerle a lo desconocido.

Blind Equation

Trío de Chicago, Illinois, que se autodefine como emotional cybergrind y lanzó a fines del año pasado su segundo disco, Death awaits, con el sello Prosthetic Records. Aunque tienen una estética más cercana a los grupos de grindcore tradicional (solo basta ver su logo), no utilizan guitarras eléctricas sino sintetizadores.

Su propuesta podría parecer una broma de mal gusto entre el personal extremo, por el hecho de fusionar sonidos en apariencia dulces con voces gritonas y letras intimistas, pero estamos en el 2024 y todo se vale a la hora de hacer música salvaje con sentimiento.

Zombieshark!

Las características de este género se prestan para que muchos artistas se animen a lanzar proyectos solistas. Es el caso de Cory Swope, con sede en Filadelfia, Pensilvania, quien ha publicado su obra usando el nombre artístico Zombieshark!

Lanzó hace poco su nuevo disco Die laughing, que sorprende por la cantidad de estilos y voces que conjuga, sin que sus canciones pierdan coherencia, en un viaje de extremo a extremo: desde el industrial más rápido y ácido hasta la nostalgia del new wave ochentero.

Bubblegum Octopus

Es el proyecto solista de Mathew Morden, radicado en Nueva Jersey, con el que demuestra su amor por el pop japonés, el metal pesado, el sonido de los videojuegos y la electrónica más experimental.

A diferencia de las calaveras, monstruos y zombis que han caracterizado la estética de la música extrema, Bubblegum Octopus elige para sus lanzamientos ilustraciones de estilo infantil en colores pastel, que se han convertido en parte de su identidad única.

Prompts

Aunque en sus canales oficiales proclaman ser una agrupación metalcore progresiva, consideramos que el sonido de este combo japonés/coreano tiene los elementos que caracterizan a la escena cybergrind, aunque ellos se inclinan más por incluir influencias de nu-metal, mathcore y djent.

El año pasado firmaron con el sello australiano Greyscale Records, que defiende la diversidad en la música pesada a nivel mundial y ha trabajado con otras bandas destacadas como Alpha Wolf, Make Them Suffer o Paledusk.

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