Daniel Sancho se declaró no culpable del homicidio del médico colombiano
La justicia tailandesa sostiene la acusación de asesinato premeditado y advierte a Sancho sobre las consecuencias según su cooperación
En una sorpresiva declaración este lunes 13 de noviembre en el tribunal de la isla de Samui, el español Daniel Sancho, de 29 años, se declaró no culpable del asesinato premeditado del cirujano colombiano Edwin Arrieta en Tailandia. Sancho, quien ha estado en prisión provisional desde el pasado 7 de agosto, negó las acusaciones de asesinato y de hacer desaparecer el pasaporte de Arrieta, aunque admitió su culpabilidad en el descuartizamiento y ocultamiento del cuerpo, asegurando que la muerte fue resultado de un accidente.
El procedimiento legal comenzará con una nueva declaración y examen de pruebas, culminando en un juicio que podría llevarse a cabo entre febrero y abril de 2024, según la Fiscalía.
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La estrategia de la defensa busca desmontar la premeditación, argumentando que hubo una pelea previa y que la muerte de Arrieta no fue premeditada, sino producto de un altercado. Según el periodista Manuel Marlasca, experto en sucesos, la defensa podría presentar cuatro atenuantes, incluyendo miedo insuperable, chantaje, arrebato y amenazas, respaldados por testigos y expertos.
En una controvertida revelación, Sancho sostuvo que la noche del asesinato, Arrieta intentó abusar sexualmente de él, provocando una fuerte pelea que resultó en la muerte del cirujano colombiano.
La relación inicialmente amistosa entre Sancho y la policía tailandesa ha dado un giro, revelando promesas incumplidas de concesiones. La policía le habría asegurado a Sancho que sería extraditado rápidamente a España y solo enfrentaría cargos de homicidio imprudente, alegando una pelea previa.
La justicia tailandesa mantiene la acusación de asesinato premeditado, respaldada por pruebas que sugieren una cuidadosa planificación del crimen. La fiscalía tailandesa advirtió a Sancho sobre las consecuencias, ofreciéndole dos opciones: confesar el crimen para evitar la pena de muerte o negar los hechos y enfrentar un proceso prolongado con la posibilidad de cadena perpetua.
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El asesinato ha conmocionado a la opinión pública española, especialmente debido a la falta de arrepentimiento visible por parte de Sancho. Aunque el joven confeso ha argumentado sintiéndose como un 'rehén' de Arrieta, los expertos destacan la ausencia de signos de arrepentimiento en sus declaraciones públicas y acciones, lo que podría tener implicaciones en la pena que enfrentará.
El caso continúa generando interés y especulación, mientras se espera que el proceso legal arroje luz sobre las circunstancias que rodearon este crimen atroz.
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