La destrucción de la naturaleza es el eje de una muestra de arte

Un oso andino duerme en medio de la vegetación, el montañista inglés Edward Whymper se prepara para subir el Chimborazo, una caja de fósforos decorado con un volcán roto. Estas son algunas de las obras y objetos intervenidos que conforman Taptana, exposición más reciente del artista lojano y Premio París 2024, Freddy Guaillas. 

La muestra abrió sus puertas en Q Galería, espacio cultural de la Universidad San Francisco de Quito (USFQ), tras ganar una convocatoria nacional en 2023. 

Según el artista, la exposición surgió hace varios años cuando, en sus excursiones a las montañas de los Andes pudo ver en carne propia la afectación humana a los parajes naturales.

“Me interesa retratar la parte alta de los Andes y abordar cómo se está comportando el medio ambiente en relación a la intervención humana y cómo se ha ido deteriorando”, comenta. 

El pintor es originario del cantón Saraguro y se licenció en Artes Plásticas en la Universidad Nacional de Loja. Es el primer artista en su familia, y desde pequeño le gustaba retratar la naturaleza que lo rodeaba. Sin embargo, con el paso de los años, vio como estos paisajes fueron cambiando o perdiéndose. Las críticas a esa depredación se cuelan de manera consciente en sus piezas.

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  “No quería repetir una forma de narrar el mundo andino que se ha usado hasta el cansancio. Quería buscar nuevas maneras de plasmar lo que me preocupa. Una pregunta con la que surgió esta exposición fue preguntarme y preguntar cuánto hemos ganado y cuántos hemos perdido en estas incursiones a nuestras montañas y volcanes”, señala. 

Describe su experiencia con las cumbres y nevados de su local como ‘íntima’, y agrega que para esta serie se adentró en ellos y convivió con los lugares y con sus habitantes. 

La curaduría de Taptana estuvo a cargo de la galerista y experta Gabriel Moyano quien describe a la obra de Guaillas como piezas que “conectan con la comprensión de la esencia de la naturaleza, reconsiderando la relación hombra-ambiente”. 

Moyano añade que el artista rompe con la idea del conquistador y explorador que doma un bosque o una montaña y “la civiliza”, poniéndola al servicio del hombre. “La producción de Guaillas es un comentario sobre la destrucción del entorno como resultado d la lógica moderna y colonial que permite la explotación de la tierra...en ella, lo ambiental siempre se enfatiza, y se protegen los valores culturales andinos”, dice.

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Y en ese sentido, el pintor agrega que las piezas no solo hacen una crítica a la depredación, sino que vindican estos paisajes desde una mirada comunitaria y cultural.

  “Los ecosistemas, para las comunidades ancestrales, no son solo un medio de subsistencia. Tienen significados simbólicos en los que está muy ligado la historia comunitaria y la identidad colectiva”, afirma. 

Taptana estará abierta al público hasta el próximo 13 de septiembre. A la par de la muestra habrá actividades vivenciales. Hoy se llevará a cabo una visita guiada de la exposición a las 15:00. El miércoles 4 de septiembre el artista presentará su portafolio en la galería. También habrá un conversatorio sobre los páramos con una serie de expertos.

Un nuevo proyecto está en marcha

En enero, el pintor recibió el prestigioso Premio París, prestigioso reconocimiento que otorga la embajada francesa a artistas ecuatorianos emergentes.

Este consiste en una residencia en Francia, donde los acreedores al galardón podrán trabajar en un proyecto. En el caso de Guaillas, esta labor será Tierra alterna, obra que se enfoca en la preservación del medio ambiente, especialmente en la fauna y a flora. “La idea es abordar este tema desde una mirada más contemporánea”, señala.

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