Ocio

Ernesto-de-Hannover.
Ernesto de Hannover.Lecturas.

Ernesto de Hannover protagoniza otro escándalo en un restaurante madrileño

El príncipe alemán, que ahora vive en España, volvió a provocar problemas. Sigue casado con Carolina de Mónaco

El todavía esposo de la princesa Carolina de Mónaco, Ernesto de Hannover, ha vuelto a convertirse en noticia. Él y su novia, Claudia Stilianopolus acudieron al restaurante Le Bistroman Atelier, en Madrid, donde el aristócrata no se comportó debidamente.

(Te invitamos a leer: Zendaya protagoniza y deslumbra en nueva campaña)

Según contó el cocinero del local, Hanover se habría atragantado con la comida, habría insultado a los camareros y después habría agredido al personal especializado y los médicos que fueron para atenderle. 

"Viene a comer por tercera vez un aristócrata europeo con un problema de alcoholismo conocido mundialmente. Rompe copas, las tira a los camareros, insulta al personal y a los otros clientes, grita, agrede al personal sanitario que viene a atenderle por un atragantamiento y se va cayendo de la borrachera”.

Juan Carlos de España.

Juan Carlos de España: Tres días de fiesta para celebrar sus 87 años

Leer más

Por su parte, Claudia Stilianopoulos, ofreció otra versión diciendo que el dueño del lugar fue el que se portó de manera grosera con Ernesto, a quien lo describió como un “amigo diabético”.

Problemas con el alcohol

Debido a los escándalos que ha protagonizado el príncipe alemán, varios cuestionan la versión de su pareja y le dan mayor credibilidad al propietario del restaurante. Ha tenido numerosos altercados públicos, muchos de ellos relacionados con su adicción al alcohol. 

Entre los más recordados se encuentra su ausencia en la boda de los reyes Felipe VI y Letizia en 2004, donde, según se informó, no acompañó a Carolina de Mónaco por una indisposición tras una noche de fiesta.

Ernesto de Hannover y la escultora española Claudia Stilianopoulos mantienen una relación sentimental desde que se conocieran en 2021 en Ibiza. Ambos residen en Madrid.

¿Por qué no se divorcia?

Carolina y él se separaron de forma amistosa en  2009. Lo que muchos se preguntan es por qué ninguno de los dos se ha planteado hasta ahora firmar el divorcio.

Todo obedece a un pacto entre los hijos del alemán y la princesa para preservar el patrimonio familiar. Ella es consciente de que, en caso de divorciarse, perdería su estatus de Alteza Real.

¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad sin límites? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!