Estefi Espín: "Aprendí a vivir y dejar de sobrevivir"
La periodista de Ecuavisa dice que ya no es la misma. Soltó los miedos y su legado será inundar el país de salud emocional.
Para la comunicadora Estefi Espín (Ecuavisa), este año que termina deja muchas enseñanzas. En 2022 dejó 'Contacto directo'. Durante 17 años madrugó y su cuerpo pedía un cambio. Asumió el horario de las 13:00 de Televistazo. Además, partió su gran amigo y maestro Alfredo Pinoargote y a su hija Emilia le diagnosticaron síndrome de Rett.
Alejandra Jaramillo no sabe lo que es una exclusiva periodística
Leer másLa periodista dice: “Aprendí a vivir y dejar de sobrevivir, a entender que desperdiciamos gran parte del tiempo evadiendo un reloj que marca cuenta regresiva sin que sepamos cuándo llega la última parada, aprendí que eso aplica para todos, solo que a unos pocos el reloj se nos hace más evidente. Vivir sabiendo que puede ser el último día, lejos de ser anticipación pesimista, es esperanza, es darlo todo, es la mejor manera de vivir para saber que cada día es un milagroso regalo de arriba”.
Según ella, ya no es la misma, pero “sin un diagnóstico, sin lecciones cuesta arriba, tampoco podría decir que soy la misma que hace 10 años. A la Estefi de antes le preocupaban cosas que hoy no ocupan mi interés ni en un 1 %, pero es parte del proceso y de seguir creciendo. Mal haríamos en ver el mismo espejo o dibujar los mismos sueños, después de tener un cara a cara con la vida.
A la Estefi de antes le gustaba planificar, creía en la ilusión del control, tenía excesiva responsabilidad sobre su futuro y el de los suyos. La Estefi de ahora aprendió ‘a las bravas’ que el control siempre fue camuflaje y falsa ilusión, que la vida se pasa mientras nos gastamos planificando. Que la vida es hoy y solo hoy, y es hermosa”.
Verito Álava se casa
Leer másEn 2022 soltó mucho, “pero sobre todo los miedos. El miedo es el mayor paralizador de los sueños. Y cuando tienes miedo a perder, estás ya perdido. Aposté por ganar, ganarle al tiempo, ganarle a cada día; ganarme cada sonrisa, ganar cada noche con mi familia, y perdí ese miedo que congela. Abracé todo aquello que se queda para siempre, el amor a los hijos, por ejemplo, no entiende de tiempos ni espacios”.
Después del diagnóstico que le dieron a su niña, “tuve un encontrón con el tiempo, y entender que nunca hay ‘momento perfecto’ me hizo lanzar con más fuerza mi programa de educación emocional en La Academia Busca Sentido, que creé justo con el propósito de inundar este país de educación emocional.
Quiero que ese sea, además de mi trabajo periodístico, parte del legado que le deje Estefi Espín a este país, porque después de 17 años de contar historias en primera persona, estoy convencida de que es lo que necesita nuestra gente para cambiar el final de cada noticia. Nadie nos enseñó a educar los pensamientos y es una de las herramientas más poderosas que he aprendido de los mejores expertos del mundo”.
Los deseos de los famosos locales para el 2023
Leer másEstefi espera discernimiento para el 2023. “Es una palabra tan poderosa por la que pido cada día. Yo estoy cargada de sueños e, increíblemente, Él me los va concediendo. Unos le llaman suerte, otros fe. Estoy creando la fundación Rett para ayudar a las niñas que tienen el mismo diagnóstico de mi niña en Ecuador. Hay mucho por hacer, yo pondré los medios, el resto va sucediendo.
Estoy poniendo todas mis cartas, mis redes, mis espacios digitales, mi academia, mi programa de educación emocional Mentoring ABS, para que cada vez seamos más los que hablemos de salud emocional. En la familia, en los trabajos, en el Gobierno, en los grupos de liderazgo, en los colegios. Que sea noticia y no vergüenza que la ansiedad, la depresión, la soledad, las adicciones, la baja autoestima, las inseguridades son los males del siglo, son las guerras que estamos enfrentando”.
Desde cada ámbito “necesitamos apostar por la educación emocional. No ha sido tarea fácil. Espero que sean más los que se sumen a empujar este proyecto, porque es responsabilidad de todos dejar de mirar, quejar, criticar desde el mismo sillón de siempre sin invertir en nuestra gente”, expresa. Y agrega que en 2022 todo vale. “Nada es casualidad sino causalidad. Me quedo con todo y abrazo cada segundo de este año vivido”.