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Freddy Ayala
El autor presentará su libro sobre metal extremo nórdico y latinoamericano en la Casa de la Cultura Ecuatoriana, sala Víctor Mideros, el 28 de febrero de 2025, en Quito.Freddy Ayala

Freddy Ayala Plazarte: “El metal nace del capital y la industria”

El escritor cotopaxense analiza la música extrema con una visión académica en su nueva obra, Hijos bastardos de la modernidad

En los últimos 15 años han proliferado las publicaciones de libros y tesis sobre el metal extremo. Es que los adolescentes metaleros de ayer ya crecieron y muchos de ellos se dedicaron profesionalmente al periodismo, la docencia, la sociología y otros campos, a los que llevaron su pasión por la música violenta.

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No olvidemos que más allá del placer sonoro que genera, la música es un documento histórico en toda regla, ya que los artistas crean sus canciones en un determinado momento político, económico y cultural, factores decisivos para entender su verdadero alcance y significado.

Como diría el pintor neerlandés Vincent van Gogh (1853-1890) en las cartas a su hermano Theo, "si nos perfeccionamos en una sola cosa y la comprendemos bien, adquirimos por añadidura la comprensión y el conocimiento de muchas otras cosas". De la misma manera, quien se adentra a estudiar el metal extremo considerando todo el contexto en el que es creado, puede a su vez adquirir conocimientos acerca de las ideas, motivaciones y temores que mueven las pasiones humanas.

La obra del cotopaxense Freddy Ayala Plazarte (Aláquez, 1983) aporta en este ámbito. Está próximo a publicar su libro Hijos bastardos de la modernidad, sobre el metal extremo nórdico europeo y de Latinoamérica, con la editorial Cuerpo de Voces, el cual fue el resultado de su trabajo de tesis doctoral en Estudios Artísticos, Literarios y de la Cultura, por la Universidad Autónoma de Madrid

En una diálogo súper generador,el autor compartió su perspectiva con los lectores de EXPRESIONES.

Su trabajo ayuda a reivindicar el aporte de Latinoamérica al metal extremo mundial.

Quise generar una versión del metal latino, no como historiador, pero sí creo que para entenderlo debes considerar todo el panorama. Cuando estudias el metal latinoamericano, no puedes separarte de la parte social y política. Por ejemplo, el sonido de Parabellum (de Medellín) responde a la violencia de su tiempo en Colombia.

Es decir, no solo narrar los hechos, sino analizarlos. Son temas que no han sido abordados con la seriedad suficiente.

Muchos metaleros se quedan en el tema del hedonismo, celebran más la música y el espectáculo. Por un lado está bien, pero hasta cierto punto me parece limitado. El metal responde a cuestiones sociales. Por ejemplo, Black Sabbath surge en Birmingham, la ciudad de la Revolución Industrial. Incluso Tony Iommi, su guitarrista, se cortó la punta de sus dedos en un accidente trabajando en la industria metalúrgica.

El baterista de Sabbath, Bill Ward, también decía que ese sonido de máquinas influyó en su forma de concebir la percusión.

Exacto. Esa sonoridad surge de la industria. El metal surge del capital y la industria.

¿Este libro es una continuación de su publicación anterior sobre el tema, Una estridencia en el abismo de la luz?

En ese entonces estaba interesado en el aspecto estético, las metáforas de las portadas, del cuerpo, el aspecto iconográfico. El metal es uno de los géneros que más importancia le dan al arte visual. El metal maneja conceptos visuales. Me parece fascinante, por ejemplo, cómo aprovecha nuestra fascinación por lo deforme. Eso me hace pensar en cuadros de El Bosco, (Pieter) Brueghel, (Francisco de) Goya. El metal va heredando eso. Esos lados marginales de la historia.

Pareciera que solo fuera música, pero cuando se lo estudia también se aprende sobre historia, sociología, política, relaciones de poder, estética.

El metal tiene dimensiones filosóficas, naturalistas, cosmogónicas. El black metal no lo puedes entender solo desde la música. Es un género más iconográfico que sonoro. Su relevancia radica en la imagen. Todas las culturas y sociedades han estado fascinadas con los símbolos, consumiendo símbolos, aunque no hemos sabido interpretarlos.

¿Estos temas generan interés en personas que no escuchan metal?

Sí. Desafía al oyente que pensaba que este género era solo una moda de gente rebelde.

El sello Cuerpo de Voces apuesta por estos temas

Este texto saldrá bajo el sello manabita Cuerpo de Voces. Su editor, Alexis Cuzme, nos habla sobre las motivaciones para lanzar este tipo de obras.

“Como lectores, antes que editores, andamos siempre atentos a temas que resulten novedosos y puedan enriquecer nuestro catálogo editorial. La obra de Freddy Ayala nos resulta interesante porque es un trabajo riguroso que se alinea con lo que está sucediendo en la región en cuanto a investigaciones que tienen como tema central el metal extremo”.

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