Halle Berry no pudo obligar a su exmarido a asistir a terapia
La actriz insistía en que actor francés demoraba las sesiones terapéuticas con su hijo acordadas en su difícil divorcio
Hay muchos indicios de que los enfrentamientos entre Halle Berry (57) y su expareja Olivier Martinez (58) están en su punto más alto.
La actriz ha presentado una nueva demanda por la custodia de el único hijo de ambos, Maceo (10), con la pretendía presionar a su marido para que siga las sesiones de terapia a las que acordaron asistir para solucionar diferencias y así llevar de la mejor manera la custodia compartida.
Berry pretendía que un juez obligara a Martínez a cumplir con el cronograma establecido en el acuerdo, en el que se habla de sesiones de terapia establecidas durante el proceso de divorcio y otros requisitos. Pero la petición fue negada este lunes 5 de agosto.
En agosto de 2023, la ganadora del Óscar afirmaba que su entonces marido intentaba retrasar las sesiones para tomarse “el verano libre”, que había cancelado las sesiones de julio para viajar a Francia, su país natal,
Según TMZ, la actriz alegaba que estar lejos no es impedimento, pues “las sesiones se realizan a través de Zoom y se pueden hacer desde cualquier lugar”. En una nueva petición al juez, agregó que había una fecha límite del 14 de junio para finalizar sus seis sesiones conjuntas, y que aún no las había culminado.
Según el equipo legal de Berry, la ausencia de Martinez ha “frustrado todo el proceso terapéutico” y obstaculizado el “desarrollo y los mejores intereses” de su hijo.
Halle Berre y Olivier Martinez, un divorcio complicado
El divorcio de Halle Berry y Olivier Martinez se dio luego de ocho años de una ardiente batalla legal. Los acuerdos indicaban que ella debía darle $ 8 mil mensuales, además del 4.3 % de sus ganancias como actriz, cuando estas superen los dos millones de dólares.
A esto se suma hacerse cargo de los gastos por la educación del hijo de ambos, el seguro médico de Maceo y las actividades extracurriculares del niño.
Según TMZ indicó en su momento, la custodia legar es compartida y, lo que no se cumplió, ambos debían asistir “a sesiones de terapia individual y familiar”.
La separación fue anunciada en 2015, según fuentes cercanas a la pareja, a causa de "personalidades muy diferentes" y a que ella no toleraba el temperamento de su entonces pareja.
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