El hijo de Marián Sabaté "no necesitó palancas para graduarse", según su hermana
Bárbara Fernandes dice que Alejandrito Kenig es muy inteligente y que cuando se concentra saca buenas notas.
Para Marián Sabaté, hay cuatro días que han sido los más importantes de su vida: cuando nacieron sus dos hijos, Bárbara Fernandes (27) y Alejandro Kenig (18). La primera es hija del brasileño Marcelo Fernandes y el segundo del exfubolista argentino que lleva el mismo nombre. Los otros dos días fueron cuando ellos terminaron la etapa secundaria.
Bárbara es actriz y forma parte de la próxima telenovela del Canal del Cerro (todavía sin nombre) que girará en torno a la selección ecuatoriana de fútbol y Alejandrito, como lo llama la rubia presentadora, la semana pasada se convirtió en bachiller (graduado en el colegio American School) y aspira a ser biólogo marino.
Este por un tiempo le dio dolores de cabeza a Marián por sus notas y aprovechamiento. "Después de que mi hijo ingresó a este centro educativo nunca más tuve que preocuparme. Lo educaron con disciplina y amor, creo que es la medida correcta. Su cambio fue muy grande", dijo emocionada en un discurso que improvisó durante la ceremonia de graduación.
En las redes sociales no faltaron los que expresaron que Alejandro necesitó palancas para finalizar la secundaria.
Es sumamente inteligente, un niño muy hiperactivo eso es todo, pero cuando él se centra saca buenísimas notas. Lo que queremos lo buscamos y trabajamos muy duro, ahora rapea, es súper bueno.
Bárbara no pudo compartir con Marián y Alejandro esa ocasión especial porque se encontraba en Colombia. "Me fui a concluir el proyecto que grabé en Europa hace un año. "Ya estoy en Ecuador".
El lunes 9, la joven actriz se sentía algo mal. Tenía fiebre (38 grados) y migraña. "Tal vez este malestar es producto del corre corre del viaje".
