Joaquin Phoenix y Lady Gaga entre los nominados a lo peor del cine por "Joker 2"
El aclamado actor y la estrella pop compiten por los premios de lo peor del cine con la secuela de Joker: Folie à Deux
El icónico personaje del Joker regresa, pero esta vez no con los elogios que recibió en 2019. La secuela Joker: Folie à Deux, protagonizada por Joaquin Phoenix y Lady Gaga, ha sido nominada a siete premios Razzie, que destacan lo peor del cine. Este giro irónico ocurre después de que la primera entrega de Joker recaudara más de mil millones de dólares y obtuviera 11 nominaciones al Óscar, incluyendo la victoria de Phoenix como Mejor Actor.
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El musical Joker: Folie à Deux se encuentra entre las películas más criticadas del año, compitiendo por el título de Peor Película y Peor Secuela. A pesar de un presupuesto mucho más alto que su predecesora, la película apenas recaudó 200 millones de dólares en taquilla, una quinta parte de los ingresos del primer filme.
Joaquin Phoenix, que fue aclamado por su interpretación en Joker (2019), ahora enfrenta la nominación a Peor Actor, mientras que Lady Gaga, quien encarna a Harley Quinn, compite por el premio a Peor Actriz.
Competencia feroz por los "antipremios"
En la categoría de Peor Película, Joker: Folie à Deux compite con títulos igualmente criticados, como:
- Borderlands, una comedia de ciencia ficción protagonizada por Cate Blanchett y Kevin Hart.
- Madame Web, un spin-off de Spider-Man con Dakota Johnson en el papel principal.
- Megalopolis, el ambicioso y confuso proyecto autofinanciado de Francis Ford Coppola.
- Reagan, un biopic del expresidente estadounidense protagonizado por Dennis Quaid.
Otros nombres destacados entre los nominados incluyen a Jennifer Lopez por su actuación en Atlas, y Jon Voight, quien se ha convertido en un defensor visible de las iniciativas culturales de Donald Trump, por su participación en Reagan.
¿Qué falló en Joker: Folie à Deux?
A pesar de las expectativas generadas por el éxito de la primera entrega, la secuela no logró conectar con el público ni la crítica. El cambio de tono hacia un musical fue considerado arriesgado, y aunque algunos alabaron las actuaciones individuales, el consenso general apuntó a un guion poco cohesivo y una ejecución que no estuvo a la altura del impacto cultural de la primera película.
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