Lenín Artieda: "María del Carmen me hace feliz"
El comunicador confiesa estar enamorado y, entre risas, dice que está esperando que su novia le pida matrimonio.
Resulta extraño ver al periodista de Ecuavisa tan distendido y feliz. Y es que Cupido hizo de las suyas hace un par de años y, desde entonces, no lo ha dejado en paz.
Lenín Artieda (44) conoció el amor de la única manera que hubiera parecido posible: durante una cobertura. Ella, María del Carmen Bunea (36), lo recibió en su calidad de relacionista pública.
La primera cita se dio un año después de aquel primer encuentro, luego de sus conversaciones vía Instagram. “A mi edad ya no podía equivocarme”, dice el periodista a modo de explicación.
Recuerdan que salieron a almorzar, pero no comieron. “Todo estaba superrico, pero nos pusimos a conversar. Pasaron tres horas y el mesero se acercó a preguntarnos qué había pasado porque nuestros platos estaban llenos”, recuerda entre risas María del Carmen.
Hablaron de todo un poco. “Aprovechamos para conocernos”, sostiene ella. Y fueron sinceros. “Le dije ‘yo soy esto, estoy divorciado, tengo dos hijos... te lo cuento por si acaso’”, recuerda él.
A partir de entonces se volvieron inseparables y decidieron empezar a escribir su historia juntos, una en la que todo apunta a que terminará en boda.
- POLOS OPUESTOS SE ATRAEN
¿Se sienten los ocho años de diferencia?
MC: El que me da un toque de juventud es él. Aquí la vieja soy yo.
L: A mí me gusta ver reels y a ella no le gusta.
¿Por qué suelen pelear?
MC: A mí me molesta su practicidad. Él actúa de acuerdo a la realidad. Por ejemplo, si le digo: ‘Me siento mal’, busco un abrazo, una caricia, pero de parte de él recibo un ‘vamos al médico, te compro una pastilla...’ Para mí es una respuesta tosca.
L: Somos muy diferentes. Soy práctico y ella es superinocente. María del Carmen atesora momentos. Yo prefiero no recordar los malos momentos. Ya hemos recibido terapias de pareja para entendernos, un amor loco necesita de psicólogo. Somos felices.
MC: Admiro la voluntad de Lenin, siempre tiene la predisposición para fortalecer más nuestra relación.
¿Lenin te conquista con su voz de poeta?
MC: Extraño que me hable así.
L: Fue mi arma de seducción, ahora hay más confianza y la incentivo de otra manera.
MC: Todos los días hay un ‘me encantas’, ‘me gustas’, ‘me fascinas’.
¿Y el anillo para cuándo?
MC: Él dice que ya lo tiene comprado.
L: Estoy esperando que me pida matrimonio (risas).
- HABLANDO DE CELOS
María del Carmen sostiene que, entre ellos, los celos no son un problema. Mientras él asegura que ella lo hace feliz, ella afirma que es muy segura de sí misma. “No encontrará otra mujer como yo, hogareña, guapa, sin hijos. Habrá una en un millón. Hay unas desubicadas que le escriben, pero como tenemos una buena comunicación él me enseña. También trabajé en el medio y más bien lo asesoro, y le digo ‘responde así, no utilices tales emoticones porque se puede malinterpretar’.
Y Lenin concluye: “Soy celoso, pero no me da chance de mostrarlo. Uno no cela a quien no le da motivos”.
- EN ÍNTIMO
¿Un logro juntos?
MC: Sobrellevar la relación en armonía.
L: Ella me hace feliz y yo la hago feliz.
¿Un recuerdo doloroso?
MC: Quizá el habernos separado por un momento.
L: No almaceno recuerdos feos.
¿Una revelación de la relación?
MC: Él sueña con tener un chivo, un chancho en casa.
L: A María del Carmen no le gustan los animales.
- PING-PONG
El más impuntual. Ambos, pero él se demora más en arreglarse.
El más enojón. Lenín, “él es 100 % expresivo”.
El más ahorrativo. María del Carmen. “Qué es eso”, pregunta él.
Hijos. Ella quiere uno solo, él quisiera que sea niña.
Fotos: Gerardo Menoscal. Producción: Alejandra Cereceda. Maquillaje y peinado: Lucy Castro (Ig: @lucycastro.pro). Locación: Luxva Hotel Boutique.