Lucía Méndez y el día que mataron a Vanessa
En 1982 el personaje protagónico de la artista mexicana fue eliminado por decisión del productor Valentín Pimstein.
En febrero de 1982 se estrenó en México la telenovela Vanessa. Su protagonista, Lucía Méndez, para ese momento había triunfado ampliamente con la telenovela Colorina, llegando a rivalizar con Verónica Castro en la preferencia del público televidente. El dramatizado producido por Valentín Pimstein, además de la Méndez, tuvo como coprotagonistas a Rogelio Guerra y a Héctor Bonilla.
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Leer másEl argumento gira en torno a Vanessa Reyes, una mujer de escasos recursos que, para ayudar a su familia, se emplea en una textilera cuya propietaria es la poderosa Cecile Saint Michel (Isabela Corona).
En la fábrica conoce a Pierre y Luciano Saint Michel, nietos de la empresaria. Vanessa se enamora locamente del primero, mientras se hace amiga del segundo. Sin embargo, lo que parecía ser una historia de amor se empaña cuando la joven mujer queda embarazada de Pierre, quien no solo se niega a hacerse cargo de la criatura, sino que le hace la vida a cuadritos al personaje interpretado por Méndez.
DESPEDIDA POR IMPUNTUAL
Según se registra en el libro biográfico del productor Valentín Pimstein, las quejas por la impuntualidad de la actriz Lucía Méndez para los llamados al set de grabación eran constantes.
Pronto se supo que la artista fue despedida del dramatizado por tantas ausencias y retrasos. De esta manera, el directivo decidió matar su personaje para no detener el trabajo de los demás. Cuando Lucía regresó, ya no había nada por hacer. En el capítulo final, el televidente observa cómo Vanessa muere con un disparo en la espalda, obviamente no era la Méndez sino una doble.
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Leer másPara la actriz ecuatoriana Ruth Coello, lo que define a un actor, además del talento, es la disciplina. “Por ser protagonistas, creen que son irreemplazables y uno tiene que aguantarles cualquier desplante. Para mí es una falta de profesionalismo”.
Considera que la decisión del productor de sacarla de la telenovela fue la adecuada. “Ser actor es un trabajo como cualquiera y no es más que el técnico en luces ni el camarógrafo, acá ocurrió algo similar cuando Luciana Grassi reemplazó a Carolina Jaume en el El exitoso Lcdo. Cardoso”.