Pedro Alonso: su disco de boleros no lo ajela de lo urbano
Orgulloso de haber nacido en Venezuela, el cantante asegura que su nacionalidad dificulta el camino en la música, pero no lo detiene.
El siglo XXI ha tratado de hacer alarde de la evolución que ha tenido la sociedad. Aceptación, menos prejuicios y más tolerancia frente a unos temas, pero hay otros como el racismo y la xenofobia que continúan arraigados en el subconsciente colectivo y eso se nota en la gente.
Las personas son señaladas por se latinas, negras, altas, bajas, gordas, flacas... Cuando se habla de discriminación cualquier adjetivo calificativo entra en la lista. Y es así como se ha sentido un par de veces el artista Pedro Alonso, quien prefiere no decir en qué país le han pedido que omita su nacionalidad venezolana o que, si la dice, recalque que vive en Miami. Esto para él es un factor que sí diferencia y hasta se podría decir, dificulta el camino de los músicos de su país, pero no los desmotiva. Él se siente orgulloso de decir cuál es su bandera.
Pedro se encuentra ahora en la promoción de su última producción, 'El disco para mamá', lanzado el pasado 10 de mayo en homenaje a todas las mujeres que han tenido la oportunidad de llevar este título. Tiene siete covers y cinco temas de su autoría.
“Todo empezó porque me invitaron a cantar 'Qué te pedí'. Nunca me imaginé cantando un bolero, pero una vez que lo hice, sentí una conexión con lo que escuchaba mi madre cuando yo era pequeño. Luego vino 'Amor eterno', y después de esa decidí hacer un disco dedicado a las madres con temas de antes y ahora. No sé por qué la mayoría de cantantes le dedican canciones a sus mamás después de que mueren, yo decidí hacerlo ahora”, contó.
Aunque el lado y tono romántico llama mucho su atención, el artista está más inclinado por ritmos relacionados a lo urbano y la salsa, una combinación que no se espera, pero que gusta a muchos.
- Con Olga Tañón y Víctor Manuel
Ser telonero de estos dos artistas latinos, dejó en Pedro Alonso buenos recuerdos. “En el concierto de Víctor Manuel, hicimos prueba de sonido, quedó todo súper bien y ya en la hora que me tocó subir a la tarima, me tocó cantar con los ojos vendados porque resultó que habían quitado todos los monitores y tuve que hacerlo con in ears". Y pasó la prueba.
El caso de Olga Tañón, dice, "cuando terminé mi presentación, el esposo me mandó a buscar a mi camerino porque Olga se quería tomar una foto conmigo. Yo creo que eso es lo mejor que le puede pasar a un artista. Luego me invitó a ver el show ahí con él, es de las mejores anécdotas”.
