El príncipe Harry ya cuenta con casa propia en Estados Unidos
Tras haber vivido en el inmueble de un amigo en Beverly Hills, el hijo menor de Lady Di se instaló con su esposa Meghan Markle en Santa Bárbara.
"Quien se casa, casa quiere", dice un refrán y es algo que lo sabe muy bien el matrimonio formado por el príncipe Harry y Meghan Markle. La pareja compró una enorme mansión de nueve habitaciones y 16 baños en el exclusivo condado de Montecito en Santa Bárbara (California). Pagaron la 'módica' cantidad de 14.65 millones de dólares y tienen como vencinas para compartir una taza de café a Oprah Winfrey y Ellen DeGeneres.
Si quiere saber más detalles, la propiedad tiene 1,353 metros cuadrados y 2.18 hectáreas para montar en caballo hasta cansarse. Setos recortados bordean las puertas de entrada con pilares de piedra.
Quien se las vendió fue el magnate ruso Sergey Grishin, quien compró la mansión por más de 25 millones en 2009 y trató de venderla por 34 millones pero terminó rematándola debido a la crisis.
El inmueble donde viven los Sussex tardó casi un lustro en edificarse e incluye también una biblioteca, una oficina, un spamun gimnasio para los aficionados al naturismo, sala de juegos, teatro, bodega y un parqueadero para cinco carros.