¿Por qué casi se subasta la ropa interior de la Reina Isabel II?
Experta en subastas no quiso poner en venta la prenda, porque consideró que hacerlo sería una violación a su intimidad
Kerry Taylor, una de las figuras más destacadas en el mundo de las subastas de moda, rechazó la oportunidad de vender ropa interior de la reina Isabel II debido a sus principios éticos. Esta prenda, que data de la década de 1950, fue adquirida de manera controversial tras ser ofrecida por la tripulación de un avión.
Aunque legal, la venta fue vista como una invasión a la privacidad de la monarca, ya que los artículos fueron adquiridos por otros a lo largo de los años, no directamente de la Reina Isabel II. Por esto, Taylor consideró inapropiado vender una prenda íntima de la reina en esta ocasión.
El historial de subastas
En varias ocasiones, objetos relacionados con la Reina Isabel II han llegado a subastas, despertando fascinación y controversia. En 2016, se subastaron prendas de vestir y ropa de cama que alguna vez fueron propiedad de la monarca. Aunque estos artículos no pertenecían directamente a la Reina en ese momento, la venta causó un debate ético, ya que se consideró una invasión a su privacidad.
Otra subasta notable ocurrió tras su fallecimiento en 2022, cuando un camisón rosa de la década de 1950 fue puesto en venta. A pesar de las críticas, este evento recaudó miles de libras, lo que sin duda alguna, refleja el interés del público por piezas asociadas a figuras reales.
Sin embargo, expertos como Taylor y algunos internautas han cuestionado la moralidad de comercializar objetos tan personales, argumentando que la privacidad debe prevalecer incluso en la realeza y demás figuras públicas, más aún si se habla de prendas íntimas.
¿Quién es Kerry Taylor?
Taylor es una experta en subastas con más de 45 años de experiencia en el mundo de la moda y los textiles históricos. Es la fundadora de Kerry Taylor Auctions, la cual es una casa especializada en la venta de objetos vintage y prendas icónicas. Su conocimiento y criterio la han llevado a manejar piezas emblemáticas como vestidos de la princesa Diana y ropa de algunos diseñadores legendarios.
A lo largo de su carrera, la experta destaca por su enfoque ético y profesional, rechazando proyectos que considera inapropiados, como este. La decisión de no subastar ropa íntima de la reina reafirma su compromiso con los principios de integridad en el comercio de piezas históricas. Este criterio la ha consolidado como una figura respetada en su campo, marcada por su sensibilidad hacia el valor histórico y moral de los objetos que maneja.
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