Alfonso Barragán: "El ego mata al artista"
El respeto en la música no se gana sumando likes, sino con un trabajo sostenido en el tiempo. El vocalista guayaquileño defiende su verdad y valores.
Hace poco un colega le preguntó a nuestro entrevistado de hoy (Alfonso Barragán) si alguna vez había pensado en tirar la toalla. “¿Por qué habría de hacerlo? ¿Por qué mi banda no le telonea a Slayer? ¿Por qué no tengo un millón de seguidores en redes? ¿Por qué no vendo miles de dólares al año en Spotify? Yo hago música porque forma parte de mi vida, por satisfacción personal, no para agradar a otros”.
A punto de cumplir 45 años de vida y más de 25 en el ruedo como vocalista de distintas vertientes del metal pesado y el rock, conversamos con el cantante sobre cuán necesario es (o no) el reconocimiento en el mundo del arte, el compromiso como virtud fundamental y la importancia de la amistad.
Úrsula Strenge llega a los 49 y con cambios en su vida
Leer másHay quienes se involucran en la música por las razones equivocadas... reconocimiento, fama, dinero.
Sí, hay quienes prefieren hacer farándula y aparecer siempre en los tabloides, pero yo me he mantenido bajo perfil. Yo dejo que mi música hable por mí.
Usted es más reconocido como cantante de thrash y power, pero ha hecho más que eso.
Sí, he hecho desde hard rock y grunge hasta grindcore y black metal, en distintos proyectos. Hubiese querido mantenerme en una sola banda, pero por diferentes situaciones no ha sido posible.
¿Qué tipo de situaciones?
No todo el mundo es serio al momento de trabajar o, de pronto, priorizan otras cosas como su familia o su empleo, o no tienen tiempo ni dinero para invertir en la música.
Talvez usted también sea en parte responsable de toda esa inestabilidad. ¿De qué se arrepiente?
Quizás de ser demasiado confiado.
Siempre es necesario hacer un mea culpa.
Puedo decir que mi mayor error ha sido no presionar a las personas con las que he hecho música y darles total libertad. Yo no vivo de la música, pero eso no significa que no me comprometa con mis proyectos. Y puedo decir que muchas veces me he quedado solo, pero seguiré haciendo música hasta que me muera y siempre hallaré a la gente adecuada para ello.
¿Considera que la vida del músico es incompatible con la vida familiar?
Pablo Ruales: "Cada día me parezco más a mi hermano Efraín"
Leer másYo soy padre soltero, tengo un hijo, de 13 años ya. Considero que todo es cuestión de organizarse, pero la música exige dedicarle tiempo y ese es un sacrificio que no todos están dispuestos a hacer.
En 2020 publicó con Nervio el álbum El país de los aullidos en 2020, que ha sonado afuera.
Sí. Con Nervio aparecimos en un compilatorio en México y otro en Perú, con bandas latinoamericanas. En otras partes valoran a las bandas latinas que tienen su propio sonido, porque tienen su propio feeling, diferente a los grupos anglosajones.
Usted puede dar fe de que nadie es profeta en su tierra.
Sí. Incluso en Buenos Aires durante una marcha de protesta de trabajadores, usaron el tema que le da el nombre al disco. Y también nos invitaron al Festival Aquelarre.
Estaba trabajando en nuevo material con otros integrantes cuando falleció su baterista Xavier López
Sí, con él había encontrado una buena química para componer. Tras su muerte, los demás integrantes decidieron dejar la banda. Pero gracias a Dios encontré nueva gente con la cual trabajar.
¿Cuáles son los planes a futuro?
Grabar nuestro segundo disco, El Reino de los Suelos. Es algo que le debo a mi amigo Xavier.
El respeto en la música no se gana acumulando likes, sino con un trabajo sostenido en el tiempo. El vocalista guayaquileño defiende su verdad y valores.
LOS ROQUEROS DEL SUR
Leonardo DiCaprio, soltero nuevamente
Leer másUsted ha tocado con muchísimos músicos. ¿Qué podría rescatar de todas esas experiencias?
He aprendido mucho de todas las personas con las que he tocado y puedo decirte que para hacer música con alguien tienes que ser amigo de esa persona. La estabilidad del trabajo musical se afianza sobre la amistad.
¿Alguien en especial que recuerde por la influencia que tuvo en usted?
Quiero destacar a todos los músicos del sur de Guayaquil. En lugares como Acacias, Sopeña, Esteros, Saiba, ciudadela 9 de Octubre, barrio del Seguro nacieron y crecieron muchísimas bandas de thrash, hardcore, punk, death, rock.
En los noventa, la zona geográfica marcaba, más que el sonido, la actitud de los músicos.
Sí, nombres como Blaze y Demolición, desde los ochenta, que influenciaron a muchísima gente; Kataluña, de los hermanos Fernando y Xavier Garcés; I.M.O.D.I.U.M., que fue mi banda; Maltrato Público; Sadic Existence y Aiwaiss, de Bosco Ávila (+); después también Porno Ducks, de los hermanos Miguel y Mayckol Ureta. Había una buena confraternidad, algo que se ha perdido ahora. El sur siempre fue sinónimo de riqueza musical y hay muchas historias que merecen ser contadas.