Veronika Sálomon, aliada del prefijo 're'
Reciclar, reusar y rescatar son palabras constantes en el vocabulario de esta fashionista guayaquileña que aplica esa premisa también en su joyería.
Están las costumbres y luego la conciencia. Cuando estas chocan y empiezan a interferir en las decisiones de una persona, los cuestionamientos del porqué de ciertas acciones empiezan a hacer más ruido. Esta situación se asemeja un poco a cómo Veronika Sálomon vivió y vive un cambio de mentalidad en el que prioriza el bienestar del medio ambiente.
Para la guayaquileña, la maternidad fue un punto importante, pues su perspectiva pasó de ‘qué lindo es el mundo’ a ‘¿qué hago para dejarle uno mejor a mis hijos?’.
Fabrizio Célleri rota entre lo sustentable y lo vanguardista
Leer másVeronika posó para el lente de EXPRESIONES y nos contó todo sobre esta transformación plasmada en su armario y en su joyería Martalía. Para las fotografías eligió su infaltable básico, una camisa blanca, que adecuó para distintos looks.
Hace muchos años, cuando Veronika empezó a leer sobre sostenibilidad y supo que la industria de la moda es la segunda más contaminante después de la petrolera, algo despertó en ella y se le quedó grabado para siempre. “Cada decisión de compra de nosotros, los consumidores, es un voto hacia el planeta que queremos construir”, asegura. Por ello, su apuesta es hacia las prendas atemporales y de buena calidad, que perduran mucho tiempo. Aunque admite que la mayoría de veces estas son un poco más costosas, no está apoyando la moda desechable actual y eso para ella es satisfactorio.
Teresa Valencia: "Mi clóset nunca pasa de moda"
Leer másTiene la certeza de que la industria sí o sí debe adaptarse a una forma más sostenible porque es la única manera de lograr que el planeta resista la moda. En estos meses se alegró al ver que Gucci, una de las firmas más lujosas e importantes a nivel mundial, se convirtió en ‘seasson less’, es decir que ya no va a tener colecciones por temporadas.
Esta decisión se está empezando a replicar en muchas otras marcas, y el futuro de un mundo lleno de ideales de tendencias y perfección está mutando a uno mucho mejor.
- Joyas con el sello carbono neutro
Fue en el Designer Book 2013 cuando Veronika y su mamá y socia, Martalía, conocieron la filosofía del ‘slow fashion’ y desde ahí no hubo vuelta atrás. Empezaron a experimentar de qué manera podían hacer ‘joyería lenta’ redescubriendo otro tipo de materiales y reciclando los propios.
Esa búsqueda les permitió también llegar al conocimiento de la carbononeutralidad. El principio de este concepto engloba ‘lo que no se puede controlar en el negocio con lo que se puede compensar’. Es decir, hay varios factores que se escapan de sus manos, como la procedencia de ciertos materiales o el transporte de insumos.
Como no todo en la cadena de producción se puede manejar, se comprometieron a medir todas sus emisiones, tanto en la joyería como en el taller. Una vez que se determina el número final, empieza el cambio, que ha venido desde optimizar el uso de aparatos como el acondicionador de aire hasta no usar papel y pasarse completamente a mostrar todo en digital. Una vez hecha la reducción, esto es compensado con el apadrinamiento de 14 hectáreas de bosque en el Oriente ecuatoriano, un acuerdo que es para toda la vida y que se va renovando cada tres años.
Asimismo, las empresarias están proponiendo a sus clientes reciclar sus propias joyas. “Por ejemplo, si vienes con un arete ‘chullo’ o en desuso, los ayudamos a rediseñarlos para volver a darles un uso”, comentó Veronika, quien añadió que la joyería consciente redefinirá el lujo. “Vamos a revalorizar lo que se considera joya y lo que se considera valioso haciendo menos daño al planeta”, finaliza.
- También dijo
“Me encantan las palabras reusar, repetir y rescatar. Quiero que la ropa perdure. En mi caso en particular, tengo una escuela maravillosa que es mi mamá. Ella cose desde los 12 años y gracias a eso entendí el proceso que toma hacer cua lquier tipo de prenda. Eso te hace valorarlas más”.
“La transformación nunca termina, pero son los pequeños hábitos sostenidos en el tiempo los que marcan la diferencia. Los empecé a desarrollar y nunca más volví a los anteriores. Hace cinco años, junto a mi familia, dejamos de usar desechables. Yo, por ejemplo, voy con mi taza de café y termo a todas partes”.
(Fotos : Gerardo Menoscal//EXPRESO. Producción: Alejandra Cereceda. Maquillaje: Ariana Taranto, IG: arianatarantomakeup. Peinado: Margarita Rodríguez, IG: @maggimakeup.hair. Locación: Plaza Lagos, IG: @plazalagos.