Abandono y olores insoportables
en Sauces 2
Mediante correo electrónico, el 3 de enero de 2020 la Alcaldía me notificó que mi requerimiento sobre una obra básica que requiere la pronta atención de las autoridades por la pestilencia de estiércol de perros y vagabundos -un atentado al medio ambiente-, por heces fecales que hacen animales y seres humanos en terreno municipal adjunto a mi casa en la ciudadela Sauces 2, cuyos olores son insoportables, y también en la vereda destruida del frente de mi casa, convertida en letrina pública, y que un oficio municipal firmado por la jefa de Estudios y programación de la M. I. Municipalidad de Guayaquil me dice que va a ir a un “banco de peticiones” “y que será periódicamente revisado”. Es decir tengo que seguir oliendo estiércol de animales y humanos que buscan este terreno natural para hacer sus necesidades.
Cabe mencionar que en el oficio que me manda no menciona el abandono de la calle destruida que le manifesté en mi requerimiento del 27 de noviembre de 2019, pues mandaron a arreglar la calle adyacente al colegio Prov. de Tungurahua, y ahí quedó; en el resto de la calle el contratista dejó señaladas con brea las partes dañadas, pero inexplicablemente, solo señaladas y nada más. Por la calle en mención de esta ciudadela circulan miles de vehículos todos los días.
Ab. Rodolfo Muñoz Morán