La aporofobia u odio a los pobres
El 'nivel de conciencia' nos hace ser más o menos empáticos
Es connatural al ser humano el valor de la bondad, de la justicia. Y ese ideal se forma, se 'positiva', en función de las acciones justas, o de los atropellos que vemos en el hogar, colegio, autoridades y gobernantes. El 'nivel de conciencia' nos hace ser más o menos empáticos. El término aporofobia -odio a los pobres- (A. Corina) ha sido incluido en el diccionario, y tenemos que verlo reflejado en el Código Orgánico Integral Penal, para combatirlo. A los más vulnerables hay que sacarlos de su sufrimiento y pobreza, garantizándoles los derechos consagrados en la Constitución, para que puedan trabajar, estudiar, gozar de salud, emprender, generar riqueza. Hay que gobernar para todos: ricos y pobres: sin prepotencia, con equidad y justicia para todos. A todos Dios nos pone cerca un trabajador: un servidor cuidador de carros, guardia o conserje, un compañero, un familiar, para ser empáticos, solidarios, subsidiarios. Así podremos vivir en un Ecuador con paz y seguridad, justicia y equidad.
Diego Fabián Valdivieso Anda