Auxiliemos al Archivo Histórico

La universidad está a pocos pasos y ayudaría a su preparación y cultura. Espero no arar en el mar

¿Qué pasa con Guayaquil? ¿Por qué pasamos de madera de guerrero a ser madera de palo de balsa? ¿Por qué nos volvimos pusilánimes unos, indiferentes otros? ¿Por qué permitimos que ministerios ineptos se burlen de nosotros? Soy parte de un grupo llamado Amigos del Archivo Histórico y en una de esas tertulias en dicha institución y disfrutando de una conferencia dada por una ilustrada historiadora ella lanzó la pregunta: ¿hay algo de verdad sobre un embargo a esta, nuestra institución? (Digo nuestra porque es de nosotros, los guayaquileños). Me quedé sorprendida y comencé a averiguar. Sucede que el famoso Banco Central del Ecuador tiene un juicio seguido por unos exfuncionarios, a quienes se les adeudan valores. Y entonces esta sagrada institución huérfana de defensa, donde las autoridades que están obligadas a hacerlo hacen caso omiso a esta estupidez de mancillar su valor, será la que sufra perdiendo su casa (el Archivo Histórico). Si los muertos pudieran levantarse de sus tumbas tuviéramos a Julio Estrada Ycaza, José Antonio Gómez Iturralde, Abel Romeo Castillo, Justino Cornejo y otros muchos, luchando a brazo partido por defender nuestro sagrado patrimonio, poseedor de valiosísima información sobre la historia de muchos siglos de la provincia del Guayas. Debemos cambiarnos de lugar, abandonar esos terrenos para cumplir con la vergonzosa deuda irresponsable de la institución bancaria, y me pregunto ¿qué hicieron, dónde están aquellos cantantes, poetas, escritores, etc., que ocuparon el Ministerio y que ni siquiera una Ley de Cultura coherente pudieron hacer? Supe que ahora el Archivo forma parte del Ministerio de Cultura y Patrimonio y que el MACC lo tiene bajo su responsabilidad. Detesto pertenecer a otros, ¿por qué no podemos ser independientes? Aunque no estoy de acuerdo con el cambio, pero adelantándome a las circunstancias, sería interesante que el Municipio, que creo que no sabe qué hacer con Guayarte, lo entregue al Archivo Histórico del Guayas para que sea su casa, para siempre, pero independiente y guayaquileña, 100/100. La universidad está a pocos pasos y ayudaría a su preparación y cultura. Espero no arar en el mar.

Martha Jurado Rodríguez