Cartas de lectores | Calle del Gran cacao o calle Real del gran cacao

Esta área fue de grandes tendales para secar cacao

Así debió llamarse la calle Panamá pues más allá de lo que se conocía desde 1820 a 1858, esta avenida tuvo varios nombres: calle Real, que nacía en la Víctor Manuel Rendón (antes Bolívar) y terminaba entre Imbabura y Thomas Martínez, a la que se denominaba calle Ciudad Vieja. También se la llamó calle La Libertad, donde se extendía un gran puente de madera que servía para comunicar las dos secciones de la ciudad. En 1926, con ordenanza municipal, se la denominó calle Panamá, desde la Av. 9 de octubre hasta la calle Loja, en reciprocidad a la ciudad de Panamá, pues ellos dieron el nombre de Ecuador a la avenida central Gran Vía, que va hacia el mar en dicho país. No refiere nada turístico de lo nuestro. Este sector tiene mucha historia y constituye valioso atractivo turístico porteño, rodeado de hoteles, museos, boutiques, restaurantes, cafeterías y murales con representaciones histórico-culturales. Debemos fortalecer la identidad de nuestro patrimonio y destacar a los cacaoteros guayaquileños como Seminario y la casa de Aspiazu, donde está el Museo del Cacao. Está pendiente un reconocimiento histórico por ser mentalizadores de la reactivación cacaotera, luego de que las plantaciones fueran azotadas y eliminadas por distintas enfermedades. Plantaciones gracias a nuevos clones que trajeron de Trinidad y Venezuela, tolerantes a las enfermedades, reactivaron la producción del cacao. Para perennizar el histórico esfuerzo de nuestros antepasados que lucharon y se sacrificaron en esa zona cacaotera de la urbe como comerciantes y exportadores de la Pepa de Oro, debemos retomar el protagonismo de Guayaquil como cuna de emblemáticas tradiciones. Esta área fue de grandes tendales para secar cacao, y comerciantes y exportadores estaban asentados en el Malecón, de cuyas casas de comercio y amplias bodegas se niegan a desaparecer los vestigios del inconfundible aroma y sus mágicos recuerdos. La Red Internacional de Periodistas y Escritores de Turismo que a honra presido, presentará la solicitud al Municipio de Guayaquil para que se cambie el nombre que identifica esta importante área turística de la ciudad.

Raúl Suconota Guevara