Cartas de lectores: Conociendo a la celestial Celica, en Loja

Celica es conocida por sus ricas tradiciones culturales, reflejadas en fiestas como la Fiesta de San Antonio de Padua

Celica fue fundada el 12 de octubre de 1860, pero su historia se remonta a tiempos precolombinos, cuando la región estaba habitada por comunidades indígenas. Durante la colonia se convirtió en un importante centro agrícola y ganadero. La construcción de la iglesia de San Pedro en el siglo XVIII marcó un hito en su historia como centro religioso y comunitario. En el siglo XIX ganó prominencia como punto de encuentro para comerciantes y viajeros por su ubicación estratégica. La producción de café y caña de azúcar comenzó a desarrollarse, impulsando la economía local. La construcción de caminos y la llegada del ferrocarril en el siglo XX facilitaron el transporte de productos agrícolas, contribuyendo a su crecimiento económico.

Celica es conocida por sus ricas tradiciones culturales, reflejadas en fiestas populares y tradicionales como la Fiesta de San Antonio de Padua, que se celebra cada año en junio, con procesiones, bailes y actividades religiosas y culturales. Hay varias atracciones en Celica: los Petroglifos prehispánicos tallados en la roca, importante manifestación del arte rupestre en la región. Su cabecera cantonal es la parroquia urbana Celica y entre las parroquias rurales se encuentran Pózul, Teniente Maximiliano Rodríguez (cabecera en Algarrobillo), Cruzpamba y Sabanilla. Según el Censo Nacional de 2023, la población es de unos 14.379 habitantes. El gentilicio es celicano. El cantón está ubicado en el centro-occidente de la provincia de Loja; limita al norte con Pindal, Puyango y Paltas; al sur con Macará; al este con Sozoranga; y al oeste con Zapotillo. Goza de una gastronomía privilegiada. El Repe Blanco, plato típico de la provincia, en este cantón tiene un toque especial hecho a base de quesillo fresco, leche, guineo y cilantro. Y la tradicional sopa de arvejas con guineo, la cecina, salchichas fritas, fritada, dulce de toronche maduro y verde, liberales, conserva, humitas, tamales. Los productos que se cultivan son propios de la zona. Debido al clima frío se da una fruta deliciosa: el toronche, de aroma singular y sabor exquisito. Hay ganadería vacuna, porcina y equina.

Alfredo Suquilanda Valdivieso