Cartas de lectores | Decimocuarto aniversario de la creación de la Aviación Militar
ui testigo del valor de sus oficiales pilotos, técnicos y especialistas en 1995
Ayer, 27 de octubre, se conmemoró el decimocuarto aniversario de la creación de la Aviación Militar, Día de la Fuerza Aérea Ecuatoriana. Con humildad y agradecimiento, desde mi posición de ciudadano común, pero con el inmenso y alto honor de haber sido parte de sus filas por 27 años, saludo a tan noble y gloriosa institución. Fui testigo del valor de sus oficiales pilotos, técnicos y especialistas en 1995; de la serenidad, aplomo y certeras decisiones de sus mandos; y del profesionalismo, conocimiento, entrega y sacrificio del personal de Aerotécnicos y Empleados Civiles, hoy servidores públicos. La misión con creces cumplida por la FAE y, en general por las FF.AA., no se basa solo en la atención logística que los gobiernos entregan a la institución, sino, fundamentalmente, en su recurso humano, que desde las fases de reclutamiento y formación se moldea en disciplina, honor, dignidad y vocación de servicio al país a través de la institución. A ellos, mis superiores y compañeros, desde mi posición de suboficial primero de Aviación en Servicio Pasivo, en esta fecha especial, presento mi saludo cívico y emocionado; mi augurio de mejores días para gloria de la patria, la institución y el bienestar de sus miembros, y mi grito ferviente que, unido siempre al de ustedes, exclama con unción y fervor patrio: ¡sobre selvas, montañas y mares, no hay alas que vuelen mejor!
Luis Eduardo Páez Rosero