Cartas de lectores | Emociones y aprendizaje

Enseñar a los estudiantes a expresar sus emociones de manera saludable contribuye a su desarrollo personal

Las emociones son clave en el proceso de aprendizaje. Cada día en el aula observo cómo los sentimientos de mis estudiantes impactan su capacidad para aprender y participar activamente.

Las emociones positivas (alegría, curiosidad) crean un ambiente propicio para el aprendizaje. Fomentar un entorno emocionalmente seguro es esencial para que los estudiantes se sientan libres de expresarse. Las emociones negativas pueden ser obstáculos significativos. La ansiedad y el estrés afectan la concentración y la memoria. He visto a estudiantes talentosos que al sentirse presionados no logran mostrar su verdadero potencial. Por eso es vital abordar estas emociones y proporcionar herramientas para gestionarlas.

La empatía es una habilidad crucial en el aula. Comprender las emociones de mis estudiantes me permite adaptar mis métodos de enseñanza a sus necesidades individuales. Al escuchar sus preocupaciones y validar sus sentimientos, construyo un ambiente de confianza que facilita el aprendizaje. Incorporar actividades que fomenten la inteligencia emocional también es fundamental. Juegos de rol, dinámicas grupales y discusiones sobre emociones ayudan a los estudiantes a reconocer y manejar sus propios sentimientos, mejorando su rendimiento académico y preparándolos para enfrentar desafíos en la vida. Enseñar a los estudiantes a expresar sus emociones de manera saludable contribuye a su desarrollo personal. Aprender a comunicar lo que sienten los convierte en individuos más resilientes y empáticos.

Roberto Camana-Fiallos