Cartas de lectores | El fenómeno Donald
Todo parece indicar que esta vez, nadie absolutamente, podrá parar el fenómeno Trump
Mientras escribo estas líneas el mundo observa nuevamente expectante la asunción al poder de Donald Trump, quien se convierte en el 47 presidente de los Estados Unidos. Tras ganar una reelección no consecutiva, el magnate inmobiliario vuelve al Despacho Oval tras haber ganado el voto popular y el del Colegio Electoral a un maltrecho Partido Demócrata, que todavía no despierta de su asombro y que ve con preocupación la paliza que les propinó el hombre del peluquín rubio.
El volátil Donald no tendrá contrapesos aparentes, su partido controla la Cámara de Representantes y el Senado, y en la Corte Suprema -máximo tribunal judicial del país- habita una mayoría conservadora de seis jueces -que él mismo se encargó de crear en su primer mandato- contra tres liberales. Todo parece indicar que esta vez, nadie absolutamente, podrá parar el fenómeno Trump.
Los millones de inmigrantes ilegales, mano de obra barata para el gran capital, imaginan su Titanic que los llevará de vuelta a sus terruños de origen si se cumplen las promesas de deportación masiva. Los ecuánimes chinos resbalan como pompas de jabón ante la amenaza de aranceles a sus productos extrabaratos y el equipo del Departamento de Eficiencia Gubernamental, dos hombres con una fortuna que supera con creces el Producto Interno Bruto de cualquier país del empobrecido tercer mundo, afilan sus garras para recortar. Al final del día, ¿estará listo el mundo para hacer a América grande otra vez?
Pablo Virgili Benítez