Cartas de lectores: Hay mucha tela por cortar

Los políticos que se vuelven politiqueros conseguirán derribar la credibilidad de los electores

Expresión tras observar lo que sucede. Hay una estrategia de dispersión, cuyo enfoque es engañar al electorado con muchos candidatos; ninguno tendrá mayoría. El voto ha sido manipulado por el ‘marketing’, vale más la apariencia que la calidad. Los méritos se convierten en deméritos, no hay coherencia en la designación; se ha priorizado el triunfo electoral. La ingobernabilidad está asegurada, se contrapone una ideología contra otra, no logran ponerse de acuerdo por el bien del país. Cada quien jala para su molino, el poder ha corrompido al elegido. Ningún terremoto nos destruirá, los políticos que se vuelven politiqueros conseguirán derribar la credibilidad de los electores, solo nos queda confiar en Dios y esperar. ¿Cómo es un político confiable? ¿Cuándo es corrompido? ¿Por qué debo votar con responsabilidad? “Hay mucho qué decir, y poco tiempo para decirlo; somos esclavos de nuestras decisiones, necesito la sabiduría de Dios para acertar más y equivocarme menos”. Proverbios 3:7... No seas sabio en tu propia opinión; tema a Jehová y apártate del mal. Reina-Valera. 1960.

Agustín Romero