Cartas de lectores | Inmersos en la oscuridad
Han tenido suficiente luz para dictar leyes, pero la Función Legislativa ha perdido tiempo
Los ecuatorianos estamos cansados del estancamiento de leyes por parte de ciertos legisladores y representantes de la Asamblea, plenamente identificados con sus ideas contrarias a cambios o innovación en leyes a favor de las personas de bien. Legislan leyes caducas, abolidas y en extinción, en su propio beneficio y de su entorno. El país está estancado y sumergido como el Titanic, en lo más profundo y sin poder salir a flote a respirar oxígeno de libertad. Los representantes escogidos en las urnas han perdido credibilidad, volviéndose a equivocar con discursos trillados y cursis, su falacia de diplomacia en vestuario de etiqueta de personas honorables. En el tiempo que lleva, la Asamblea no ha dictado una sola ley a favor del pueblo; me hizo recordar mi época de jardín de infantes: todos pasamos haciendo travesuras y saliendo temprano. Han tenido suficiente luz para dictar leyes, pero la Función Legislativa ha perdido tiempo. Hoy quieren usar velas; cuidado se queman ellos mismos. Las leyes deben ser justas y equitativas, claras y estables; el respeto se gana.
Javier Valarezo Serrano