Cartas de lectores: La Liga Azul que se viene con todo

Los bandidos que conforman el CPCCS son siete, con sus respectivos alternos. Con mayoría correísta (Liga Azul), se han reunido para dividirse el país, pues para eso fueron entrenados. Este irónicamente llamado ‘Quinto Poder’ fue otro organismo maléfico inventados por el prófugo para apoderarse de todo lo imaginable en desmedro de la Asamblea, ya que era más fácil pelearse o aliarse con siete testaferros que con 137 asambleístas. Una vez destronado Correa por Lenín, los ‘bandidos’ sobreviven peleándose entre ellos y sin designar las autoridades de su competencia por culpa del ‘mal reparto’. Siendo siete miembros conforman mayorías, cuatro contra tres, y si hay empate siempre habrá un ‘comodín’ que se irá con el mejor postor. Los bandidos tuvieron como primer jefe a un cura ladrón correísta, y así otros tantos detestables consejeros que solo saben delinquir. En las últimas semanas al menos tres de la Liga Azul fueron destituidos por el TCE, esperando una inevitable ratificación de sentencia en segunda instancia, pero aun así, condenados, se dan modos para aprovechar maniobras y trafasías que alargan plazos para cargar con las postreras pero jugosas ‘chauchas’. Con una consejera ‘comodín’ empezaron el asalto de los organismos de control. Devolvieron a la Corte Nacional la terna para elegir presidente del Consejo de la Judicatura, dando al presidente Suing 48 horas para mandar otra. Anularon la designación del superintendente de Bancos para colocar al de su gusto, resultando sospechoso pongan a ‘su’ hombre, generalmente considerado operador político del narcotráfico, a controlar el lavado de dinero. ¿Qué hallarán en el teléfono que confiscaron a Verduga? Todo fue felicidad y sonrisas hasta que llegó la ley (Diana Salazar) a la Asamblea a presentar su informe y luego a su despacho a conocer cuántos ladrones más han caído en su ausencia. Como dice Roberto Aguilar (EXPRESO 24 de enero): “los consejeros correístas de la autodenominada Liga Azul son una ilegalidad en sí mismos”. “Quizás... no tengan un carnet de afiliación, pero eso no cambia el hecho de que todos son auspiciados por el correísmo. Hasta que el TCE o la Corte Constitucional confirmen su destitución, ellos habrán reconfigurado el mapa del Estado ecuatoriano. Los siguientes pasos son la toma del Consejo de la Judicatura, nombramiento... del nuevo fiscal, la reconfiguración del CNE.. Son cuatro de un organismo de siete: el cielo es el límite”. Veremos si Noboa y Salazar se hacen respetar.

Carlos Mosquera Benalcázar